El Castellón afronta hoy en La Rosaleda de Málaga el cuarto partido de una promoción sin tregua. A los albinegros, tras superar a la Peña Deportiva ibicenca en la primera eliminatoria, les tocó en suerte el rival que nadie quería. El Atlético Malagueño, segundo del grupo andaluz, dio muestras de su potencial en la ida en Castalia, donde enderezó en la segunda mitad un partido que se le había puesto cuesta arriba. El 2-1 definitivo conlleva para el Castellón un escenario en la vuelta de mínima ventaja y máxima exigencia. Los de Kiko Ramírez deberán ofrecer su mejor versión para conquistar una plaza en la final por el ascenso.
El Castellón se presenta en la cita con un quebradero de cabeza demasiado habitual. La baja por sanción de Raúl Fabiani obliga de nuevo al parche en la delantera. Kiko Ramírez dejó fuera de la lista a la opción del filial, Vicent Albert, y a Antonio Martínez, todavía recuperándose de su dolencia muscular. Gaizka Saizar, el único punta de la citación, apenas ha jugado unos minutos en los últimos siete meses. La variante pasa por reubicar a un extremo en punta -Carrillo, Jesús López o Ebwelle- o adelantar a Charlie Meseguer a la posición de falso nueve.
Como fuere, la fuerza del Castellón en la eliminatoria radica en el bloque. Así se constató en Castalia, en especial en el primer tiempo. A Kiko Ramírez no le importó ceder la pelota al filial andaluz: se ordenó juntando líneas, robó donde quiso y salió feroz al contragolpe. Así llegaron los dos goles de Ebwelle, y así minimizó el peligro visitante. Solo cuando flaquearon las fuerzas y el equipo dio un paso atrás, tras el descanso, el Atlético Malagueño creó verdaderas situaciones de peligro. Marcó una que alimenta su esperanza para un partido de vuelta que promete fuertes sensaciones.
En el tapete de La Rosaleda se intuye un partido similar. El Malagueño añade a su abanico de talentosos futbolistas la aportación del venezolano Jaime Moreno, su máximo goleador. Recupera además al central Luis para corregir la debilidad defensiva que padeció en Castalia. El Castellón, que elude excusas de horarios, bajas y temperaturas, ha subrayado durante la semana la necesidad de generar ocasiones y marcar goles. Solo con defender no le valdrá para lograr su objetivo: quedar un paso más cerca del ascenso de categoría.
