Una de las caras de ángel situadas en el portón plateresco de la iglesia arciprestal de Vinaròs, declarada Bien de Interés Cultural en 1978, se desprendió y cayó al suelo ayer. Los restos fueron recogidos por un vecino del municipio, que posteriormente los entregó al arcipreste Emili Vinaixa.

Desde la asociación cultural Amics de Vinaròs su presidente José Luis Pascual dijo poco después de que tuviera lugar este suceso, que «este desprendimiento parece más propio del resultado de algún golpe recibido, ya que el arco inferior también sufre una rotura». Para Pascual, «probablemente fue consecuencia de un golpe que rompió parte del arco y también afectó a la cara del ángel, que con el paso del tiempo finalmente se ha desprendido».

El presidente de Amics de Vinaròs apuntó que «esta figura se podrá restaurar sin ningún problema gracias a que un vecino se percató de que los restos de la figura estaban en el suelo y se la dio al párroco» y destacó la importancia de esta puerta, que «afecta a una parte del patrimonio que es importantísimo, ya que la puerta plateresca es de lo mejor que tenemos en cuanto a patrimonio en Vinaròs». Se trata de una portalada renacentista que se traslado del antigua iglesia de Vinaròs cuando se construyó el actual templo. Fue construida entorno al año 1560 y es de estilo plateresco.