El entrenador del Villarreal Fran Escribá estaba lógicamente muy contento con la victoria en el tiempo de descuento en Anoeta y considera que el triunfo «es un refuerzo para la plantilla», tras la goleada encajada el jueves ante la Roma en la Europa League. La victoria contra la Real Sociedad afianza al Villarreal en los puestos europeos. Los amarillos son sextos, a dos puntos de la Real, que es quinta, y a seis del Atlético de Madrid, que es cuarto. La próxima jornada recibirá al Real Madrid, líder del campeonato.

«Evidentemente desde el punto de visto anímico es muy bueno porque estábamos dolidos por el partido del otro día, aunque sabíamos que en la Liga estábamos bien y hoy (por ayer) se ha confirmado», señaló Escribá tras el encuentro. El valenciano negó que el dominio de los donostiarras en la primera mitad obedeciera a la estrategia diseñada por él para este choque, eso sí admitió que los vascos controlaron claramente el juego. «No era una cuestión de miedo sino porque ellos nos atacaron bien pero sin hacer grandes ocasiones de gol», comentó el técnico, que también subrayó que la Real no hizo ocasiones claras para marcar y que su portero Sergio Asenjo no tuvo prácticamente que intervenir.

Preguntado sobre si este rearme moral puede conceder alguna opción a su equipo de superar al Roma en el partido de vuelta en Europa, Escribá tiene claro que lograrlo sería prácticamente «un milagro». «Con un 0-4 no me tomo la vuelta como un trámite porque defendemos un escudo e iremos a ganar y hacer las cosas lo mejor posible», señaló Escribá, que sí dejó claro que «si se abriera alguna puerta« en Roma tratarían de «aprovecharlo».

«Lo necesitábamos»

El héroe del partido fue el mediapunta Samu Castillejo, que admitió «el daño» que causó en la plantilla la derrota ante la Roma, lo que daba un matiz especial al partido de ayer. «Lo necesitábamos; venimos haciendo muy buen trabajo y muy buenos partidos. Nos estaba contando hacer el gol, que es lo más determinante en el fútbol, y nos hemos podido llevar la victoria en el último minuto».

El entrenador de la Real Sociedad, por su parte, lamentó la derrota, y la atribuyó a la «mentalidad por buscar el triunfo». «Esas ganas de vencer un partido para el que estábamos haciendo méritos nos llevó a una fase en la que debíamos de haber tenido paciencia, tranquilidad y cabeza para lograr el empate», aseguró Eusebio Sacristán.