La protectora que rescató a la jauría de once perros que supuestamente atacó a un agricultor en la Vall d'Uixó hasta causarle la muerte estudia pedir el indulto de los canes si finalmente la investigación concluye que participaron en el ataque del pasado 2 de enero.

La protectora tuvo que realizar un segundo rescate de los animales tras fracasar el primero en la tarde del 6 de enero por falta de información sobre las condiciones en las que se encontraba la jauría. «Nueve de los perros colaboraron en la recogida, pero en dos de ellos hubo que utilizar la lazada», relata uno de los participantes en el rescate, en el que estuvo presente y colaboró el investigado por esta causa y que incluso fue atacado por uno de los perros más agresivos cuando intentó cogerlo. En el rescate, los miembros del Hogar de San Antonio estuvieron acompañados por miembros del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), que rodearon la finca para garantizar la seguridad, y agentes de la Policía Local de la Vall d'Uixó.

La investigación se centra ahora sobre cuatro de los canes y por el momento se está a la espera de los resultados de ADN de los pelos y saliva encontrados en las heridas que presentaba el agricultor, para ver si corresponden a los perros.

La jauría permanece en las instalaciones de la protectora, que los mantiene aislados de forma individual del resto de perros. «Hay que destacar que se trata de perros que posiblemente han matado a una persona y en todas las actuaciones ha participado el Seprona. Cuando llegaron se les hicieron pruebas de rabia, pelo, babas y una revisión veterinaria», destacaron. Así mismo, indicaron que «vinieron con gusanos; se les desparasitó, y había que hacer una analítica completa, pero como están bajo investigación no podemos hacer mucho». Respecto a su comportamiento, indicaron que «se trata de perros criados en manada, salvajes y que se hacen fuertes; hay un perro líder que da la orden y el resto ataca y este sí ha mostrado mucha agresividad».

De hecho, en un ataque previo ocurrido en el mes de abril, por el que se registraron denuncias y actuó incluso la Guardia Civil, un hombre tuvo que encaramarse a un árbol de una finca cercana para esquivar el ataque de los perros, cuya manada estaba integrada en ese momento por cuatro miembros.

Cabe apuntar que la entidad que respalda a la protectora en el plano administrativo está incluida en el registro de núcleos zoológicos de la conselleria de Agricultura y Medio Ambiente y que su actividad cumple con los parámetros normativos. Además, desde la entidad se quiso puntualizar que «en todo momento se hizo un rescate limpio y humanitario, guiado por el Seprona y la Policía Local y se ha llevado a cabo un proceso que cumple de manera estricta con el protocolo».

La investigación que guía el juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 3 de Nules está a la espera de los resultados de las pruebas de ADN que han sido enviadas a un laboratorio en Madrid.