Levante de Castelló, Castelló

La lluvia cayó con intensidad durante toda la jornada de ayer sobre los municipios de la provincia. A mediodía se registraban 75 litros por metro cuadrado en Alcudia de Veo y otras localidades como Benassal y Onda contabilizaron 58 y 50 litros, respectivamente. El mapa de índice pluviométrico se completó con los 60 litros por metro cuadrado en l$27Alcora, 57 en Xert, 66 en Catí, 46 en Cervera y Atzeneta, 50 en Alfondeguilla y 58 en Montanejos. En Castelló ciudad cayeron 45 litros desde el mediodía del martes hasta ayer a las 14 horas.

En Vilafranca las lluvias provocaron desprendimientos en el camino que une esta localidad con la depuradora de aguas residuales. El consistorio contrató una pala para retirar las piedras del camino y restablecer así la circulación. En la calle Colón se desplomó parte de un muro sobre unas pequeñas huertas. En el observatorio meteorológico de Vilafranca se contabilizó 42,8 litros por metro cuadrado, informa Josep Domingo.

En Nules el barranco de la Serraleta está siendo vigilado constantemente por las patrullas de la policía local para alertar de cualquier posible subida del caudal, aunque ayer el nivel de agua era escaso. Las obras de acondicionamiento tratan de evitar una riada como la de 2004. Las lluvias afectaron en gran medida a diversos caminos rurales situados en la zona del marjal, informa Sara Rios. Debido a las fuertes lluvias en la comarca de la Plana Baixa, la Vall se vio obligada a declarar el estado de alerta roja, informa Carmen Rovira. Además, en la calle Mare de Déu dels Àngels de Vila-real se desprendió una cornisa de un edificio. En Almassora se desplegó el operativo para evitar el caos en la playa.

En Benicarló la gran cantidad de agua caída provocó cortes en el Camino Racholar, en el acceso por la N-340 al centro comercial Costa Azahar y más concretamente en su paso subterráneo, y en el camino Mallols, que si bien despertó cortado fue reabierto al mediodía debido a un descenso pronunciado de las aguas, informa Noemí Oms. Por otro lado, los principales problemas para los peatones se encontraban en el camino de Sant Gregori con las cunetas repletas de agua y en la avenida Papa Luna, donde una vez más los inmensos y profundos charcos pusieron en evidencia los problemas en la capacidad del alcantarillado en la propia avenida y las calles adyacentes a ésta.

Por otro lado, en Peñíscola no se produjeron incidencias destacadas. De hecho, puntos tradicionalmente problemáticos como la Ratlla del Terme no tuvieron que ser cortados al tráfico rodado.

En la Llosa, el temporal ha provocado que se desbordara el cauce del barranco de Talavera, y un caudal de agua en El Caminàs, camino que conduce hacia la playa, informa Jorge Casals. Las fuertes lluvias obligaron a cortar en Onda el camino viejo de Castelló y el de la Ratlla de Vila-real, informa Carlos Rodríguez.