Pilar G. del Burgo,Valencia

La Conselleria de Sanidad alertó el pasado viernes al Ministerio de Sanidad de que dos niñas de la ciudad de Valencia habían entrado en coma tras administrarles la segunda dosis de la vacuna contra el virus del papiloma humano. A las dos menores, que residen en Burjassot y en el distrito Marítimo, se les inoculó una vacuna del mismo lote, el NH52670, que ayer inmovilizó el ministerio tras ordenar que se suspendiera su administración de forma temporal.

De ese lote se han distribuido en España 75.585 dosis, de las cuales 21.272 se han distribuido en la Comunitat Valenciana, según el ministerio.

Las dos niñas que se vacunaron en días distintos (Raquel, de Burjassot, el miércoles y Carla, del Marítimo, el viernes) sufrieron los mismos síntomas, que aparecieron transcurridos entre quince minutos y media hora después del pinchazo: convulsiones y pérdida de conocimiento. A las dos menores les administraron la vacuna en sus respectivos centros de salud (Burjassot y Serrería) y ambas fueron trasladadas al hospital Clínico en ambulancia e ingresadas en la UCI.

Carla salió de Intensivos el sábado. Su estado de salud había mejorado y decidieron llevarla a una planta. Durante tres horas se rió con sus primas y sus familiares, pero la esperanza se truncó cuando la menor, de 15 años, volvió a sufrir convulsiones. Esa misma noche regresó a la UCI donde le indujeron un coma, para que no se ahogara. Ayer por la tarde le realizaron una Resonancia para ver si tiene daños en el cerebro. La niña está entubada y lleva dos goteros y permanece sedada e inconsciente desde que llegó la UCI.

Raquel, por su parte, de 14 años, permaneció en Intensivos también en coma hasta el domingo por la mañana que la sacaron a la planta de hospitalización. En la tarde de ayer la niña presentaba malestar y mareos.

Fuentes próximas a la familias han informado a Levante-EMV que en el colegio Nuestra Señora del Rosario, donde Carla estudia 2º de ESO, otras cinco niñas sufrieron mareos, malestar y vómitos el mismo viernes que Carla era trasladada al hospital. Parece ser que en el centro escolar les proporcionaron chocolate para aplacar los síntomas.

La propia Carla ya sufrió una reacción adversa con la primera dosis de la vacuna, el pasado 17 de noviembre. Fiebre, fuertes dolores de cabeza y ganas de vomitar que la impidieron acudir por la tarde al instituto. Igual que ella, otras niñas también experimentaron síntomas similares. Todas cayeron en un sopor y sueño profundo.

Carla no quería vacunarse

El viernes, antes de ir al centro de salud de Serrería para que le administraran la vacuna, Carla ya advirtió que no quería ir, que tenía miedo. E insistió varias veces, según ha sabido este periódico de fuentes próximas.

La niña perdió el conocimiento y se desmayó en el patio del colegio Y a continuación comenzaron las convulsiones. Su familia está destrozada.

Piden la suspensión de la campaña

Por otra parte, las familias de ambas niñas han comunicado que como consecuencia de la administración de la vacuna las menores han permanecido en la UCI con un cuadro de extrema gravedad. Los familiares han advertido a las autoridades sanitarias que se trata "de un efecto secundario de la vacuna" y han destacado "la necesidad de detener de inmediato la campaña de vacunación". Los familiares han denunciado que ninguna autoridad se ha puesto en contacto con ellos para interesarse por la salud de las niñas.