J. L. García, Valencia

El secretario general del PP, Ricardo Costa, cargó ayer contra la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, a cuenta de la polémica, que todavía colea por su empadronamiento en Beneixida en la últimas elecciones, de 2008. La Oficina del Censo Electoral confirmó el viernes que De la Vega quedó inscrita en el municipio valenciano. El dirigente popular pidió "una explicación razonable" a la vicepresidenta sobre "por qué se empadronó fuera de plazo".

Con todo, Costa afirmó: "De todos es conocido que la residencia oficial de De la Vega está en Madrid. Pasa sus vacaciones a costa de los españoles viajando por España y por el mundo". Y añadió: "Por cierto, que ayer [por el jueves] vino a comer a Valencia a una falla, vino en avión militar, con cuatro escoltas, dos coches, dos personas de Protocolo. 16.000 euros en total, aproximadamente, que pagamos todos los españoles. Fenomenal". "Podría haber tenido el detalle de pasarse por las fiestas de Castellón, aunque fueran cinco minutos", apostilló.

Cabe recordar que la vicepresidenta De la Vega visitó el pasado 19 de marzo algunas comisiones falleras. Estuvo en Convento Jerusalén y Nou Campanar, así como en la falla Na Jordana, donde comió junto a la comisión, el delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, y el secretario general del PSPV, Jorge Alarte, entre otros. Fuentes del Gobierno declinaron hacer declaraciones a este periódico sobre las palabras de Ricardo Costa.

Las palabras del número dos del PP valenciano se produjeron durante la presentación del comité de campaña para las elecciones europeas del próximo mes de junio. Ricardo Costa, al que el juez Garzón acusa de recibir trajes pagados por la trama corrupta de la operación Gürtel, eludió ayer aclarar si va a presentar las facturas que justifiquen la compra de la ropa: "Ya lo hemos dicho y lo reitero: el PP tiene claro que las acusaciones del auto son falsas e infundadas y lo demostraremos en sede judicial", dijo como única explicación.

Tampoco explicó si presentará la dimisión en caso de resultar imputado por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. Costa volvió ayer a pedir la dimisión del alcalde de Elx (PSPV), Alejandro Soler, por haber "reconocido que ha cogido dinero de los ilicitanos y ha pagado actos del partido". Cabe recordar que Soler está imputado por posibles delitos de malversación de caudales públicos y prevaricación, acusado de pagar con dinero público anuncios de actos del PSOE en campaña.

Petición por el reconocimiento

Preguntado por si, en coherencia con su petición, dimitirá en caso de ser imputado, Costa dijo que no ha pedido la dimisión de Soler por estar imputado, sino por haber "reconocido" que se "ha llevado dinero para financiar actos del partido". "Quien pide la suspensión de militancia para los imputados es el PSPV porque nosotros siempre hemos creído en un principio constitucional que es el de presunción de inocencia", concluyó el número dos del PP.

Lo cierto es que en el Partido Popular sí se ha forzado a los imputados en el caso Gürtel a pedir la suspensión de militancia. Sin ir más lejos, el ex vicepresidente del Consell Víctor Campos, uno de los dos imputados valencianos y el único que milita, fue forzado por la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, a darse de baja en el partido tras su aparición en el auto de Garzón.