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El protagonista del acto de apertura del curso en la Universitat de València fue ayer su rector, Francisco Tomás, quien dejará el cargo dentro de cinco meses tras ocho años de mandato. Su extenso discurso, en el que aseguró que "la corresponsabilidad a la hora de afrontar la crisis no nos eximirá de la responsabilidad de reivindicar para las misiones que necesitan nuestras instituciones", fue ovacionado durante dos minutos con todo el Paraninfo puesto en pie.
La ceremonia, más cálida que en otras ocasiones, contó con la presencia de numerosos representantes de la vida política y académica valenciana, además de con un amplio despliegue policial en las inmediaciones, en donde un pequeño grupo estudiantil (SEPC) se quejó del sistema de reforma de los nuevos grados universitarios. De este proceso de adaptación a Bolonia y al "movimiento de protesta, especialmente intenso en la Universitat" se refirió el rector quien subrayó que "a pesar de la legitimidad de la protesta, no se pueden entender algunos de los métodos aplicados".
El conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, intervino en nombre del Consell. En su discurso, un catálogo sobre las inversiones realizadas en los campus públicos en los últimos años, -"la Generalitat ha incrementado un 67,4% los recursos destinados a la Universitat en diez años", apuntó- no se refirió al Plan de Financiación Universitaria, cuyas negociaciones están concluidas.
"La Generalitat mantendrá el esfuerzo en la financiación" en investigación y desarrollo (I+D), señaló el conseller en clara alusión al recorte del 40% previsto por el Gobierno central a esta partida. En esta referencia coincidió con el rector, del que destacó "el reconocimiento a su trayectoria" por "su cooperación y lealtad institucional".
La educación es prioritaria
"De confirmase esta propuesta se verían gravemente afectadas las partidas competitivas, becas y proyectos de investigación, sobre las que se basan, en gran medida, la investigación en la Universidad" lamentó Tomás para quien "el gasto en educación y en I+D no debe ser nunca considerado como un gasto corriente sino como una inversión de la máxima prioridad".
De las crisis, el rector se quejó de que "aparecen en un momento en el que la economía de las universidades se encuentra en el proceso de ajuste para corregir el desfase entre los ingresos reales percibidos y los asignados por la Generalitat en los pasados ejercicios económicos". También tuvo críticas a las múltiples reformas legislativas "muchas innecesarias e ineficaces" comentó.
Aunque subrayó que "tiempo habrá de hacer balance" se mostro con la "conciencia tranquila" de quien ha hecho un buen trabajo por la Universitat que "hoy está mas cohesionada que nunca, con un proyecto común, un plan estratégico que nos guía hacia el futuro" resaltó. Francisco Tomás instó, también, a los miembros de la comunidad a implicarse en el proceso electoral a rector.
