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Siete colegios de la Comunitat Valenciana sólo admiten en sus clases a alumnos del mismo sexo y, pese a vulnerar de este modo la Ley Orgánica de Educación, reciben dinero público de la Generalitat. Los siete centros escolares están vinculados al Opus Dei y mantienen un concierto económico con la Conselleria de Educación. La anomalía no es nueva. Pero aprovechando que otros gobiernos autonómicos como los de Andalucía, Cantabria, Asturias o Baleares están anulando sus conciertos con colegios masculinos y femeninos, Esquerra Unida presentará hoy en las Corts una proposición no de ley en la que pide al Consell que corte la financiación pública a los siete colegios segregadores.

La diputada autonómica de Esquerra Unida Marga Sanz invoca la Ley Orgánica de Educación, de carácter estatal y aprobada en 2006. Su artículo 84.3, relativo a la admisión de alumnos, es tajante: "En ningún caso habrá discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social", establece la ley.

El mismo artículo se reproduce en el Decreto 33/2007 del Consell, que regula el acceso a los centros docentes públicos y privados concertados. Y por si quedase alguna duda, la orden autonómica de 26 de diciembre de 2008 relativa a conciertos educativos determina que el centro "se obliga al cumplimiento de las normas de admisión de alumnado" que establece la LOE.

Otra diputada de Esquerra Unida, Marina Albiol, manifestó ayer a este periódico que "la LOE obliga a estos centros a admitir alumnos de los dos sexos si reciben fondos públicos". Es más: Albiol añadió que "la segregación puede ser incluso anticonstitucional" por la vulneración de derechos fundamentales que supone.

Vinculados al Opus Dei

De los siete colegios concertados que todavía separan por sexos en la Comunitat Valenciana, seis pertenecen a Fomento de Centros de Enseñanza. Se trata de una empresa fundada en 1963 y que, bajo el paraguas ideológico del Opus Dei, gestiona actualmente más de 35 centros de enseñanza en España. En la Comunitat Valenciana tiene un colegio masculino y otro femenino en cada provincia. Concretamente, uno masculino en Torrent y otro femenino en Valencia; uno para chicos en Elx y otro para chicas en Alicante; y dos colegios diferenciados por sexos en Betxí. El séptimo colegio segregador es el de Guadalaviar, un centro educativo situado en Valencia que gestiona directamente la Prelatura del Opus Dei. Sus partidarios defienden este modelo de "educación diferenciada" porque "mejora el rendimiento académico".

En estos colegios no sólo hay diferenciación de sexos entre los alumnos. El carácter segregador alcanza también a los profesores. En los colegios de chicas, sólo hay profesoras. Y en los de chicos, únicamente imparten clase los docentes varones. Este aspecto fue denunciado también por EU, porque entraña, en su opinión, una "discriminación" laboral.