Siete años después de que estallara el escándalo político, el presidente de la diputación, Carlos Fabra, volvió a pisar los juzgados de Nules. Y una vez más lo hizo entre abucheos y aplausos.

A las once menos cuarto, Fabra salía del coche oficial. Quince simpatizantes de Esquerra Unida calentaban el ambiente y desplegaban una pancarta contra la corrupción. Frente a ellos, sus partidarios. "Presidente, presidente", gritaba más de medio centenar de simpatizantes y cargos provinciales que arroparon a su líder, entre ellos algunos alcaldes. También estuvieron Javier Moliner, vicealcalde de Castelló; el presidente en funciones, Francisco Martínez; y el vicepresidente Vicente Aparici.

Antes de entrar a declarar ante el juez Jacobo Pin -ante quien no consiguió aclarar el origen de los 880.000 euros supuestamente evadidos al fisco- Fabra leyó un breve comunicado. Dijo que es que es "inocente" y que ha sido víctima de un complot del ex ministro Jordi Sevilla.

El líder provincial del PP insistió en que acudía ante el juez a petición propia. "No tengo nada que ocultar. Vengo a demostrar las mentiras que sobre mí ha vertido una persona que hoy cumple 10 años de condena por diversos delitos", explicó.

La persona que cumple 10 años de cárcel no es otra que su ex socio, el empresario Vicente Vilar, gerente de Naranjax, hoy encarcelado por la violación de su ex mujer. Para Fabra, "la izquierda y sus terminales mediáticas" han dado "absoluta veracidad" al industrial que le acusó en los tribunales de cobrar comisiones millonarias a cambio de favores políticos.

Además, lamentó que no se le haya concedido el derecho a la presunción de inocencia "como a cualquier ciudadano".

El presidente del PP provincial lanzó un mensaje a todos aquellos que desde el año 2003 -cuando estalló el caso Fabra- han pedido su dimisión. "No he dimitido porque soy inocente", explicó con rotundidad.

Mensaje para Jordi Sevilla

Durante los escasos tres minutos que empleó en su discurso, lanzó un mensaje para el ex ministro socialista Jordi Sevilla: "Y por último quiero aprovechar estas palabras para señalar que el único compromiso que los socialistas han cumplido en esta provincia es el que en la campaña electoral de 2004 hizo el señor Sevilla, cuando anunció que si ganaban las elecciones mandaría a la Fiscalía Anticorrupción para investigarme, y vaya si la ha hecho".

Como si de un mitin político se tratara, el presidente de la diputación Fabra arremetió contra la oposición, a la que acusó de no haber cumplido sus compromisos con la provincia, "con el agua, el AVE, la N-340, la A-68, la AP-7, el aeropuerto, la regeneración de la costa o los accesos al puerto por ferrocarril".

Fabra rubricó su intervención mostrando su agradecimiento al donante que le cedió el hígado y a su familia. "A ellos les debo estar hoy aquí", dijo. Luego se escabulló entre la gente y entró a declarar ante el juez de Nules una vez más.

El fiscal no cree en la coartada de Fabra y mantiene su acusación

Según fuentes judiciales, Fabra trató ayer de convencer ayer al juez de que los cientos de movimientos bancarios detectados en su patrimonio entre 1999 y 2004 obedecen a traspasos entre sus cerca de 100 cuentas corrientes. Esta coartada no es creíble para el fiscal anticorrupción, Luis Pastor, que no ha encontrado "motivo alguno" en la declaración del presidente de la diputación para modificar su acusación por los delitos de cohecho, tráfico de influencias y fraude fiscal. Por tanto, Pastor sigue solicitando para Fabra 15 años de cárcel y diez de inhabilitación para ejercer cargo público.

Preguntado al respecto por los periodistas, el fiscal aseguró que no ha encontrado "elementos" para "cambiar nada" en su escrito de acusación y subrayó que el presidente del PP provincial se ha limitado a ejercer "su derecho a la defensa, y punto".

Según las fuentes judiciales, el presidente de la diputación contestó de forma "ambigua" a muchas de las cuestiones planteadas por el propio instructor y rechazó ofrecer información más precisa. Fabra ha atribuido a movimientos entre distintas cuentas los 3,6 millones que obtuvo en ingresos en sólo cinco años, pero respondió con "ambigüedades" cuando el juez le preguntó por operaciones concretas. Las preguntas se centraron "en los numerosos préstamos e ingresos no declarados", mientras que los asuntos relacionados con la acusación de cohecho y tráfico de influencias por una supuesta agilización de licencias de productos fitosanitarios de la empresa Naranjax quedaron "aparcados", informa Efe.

Según fuentes próximas a fiscalía, el juicio contra Carlos Fabra podría celebrarse la próxima primavera, aunque Pastor no se atrevió a dar plazos concretos ayer.