Por segundo año consecutivo, los directores de los institutos de secundaria de Valencia y provincia organizan con "incertidumbre" el nuevo curso ante las "informaciones contradictorias" que recibe el colectivo de la Conselleria de Educación, en pleno cambio de titular. Así lo pusieron de manifiesto ayer diferentes responsables de centro en la asamblea celebrada en el Luis Vives, a dos días de que concluyan las clases.

Los directores constataron que, a pesar de que desde la conselleria habían asegurado a los representantes de su asociación que no se incrementarían las ratios (número de alumnos en un aula), la realidad está siendo muy distinta y se están imponiendo criterios que superan, en algunos casos, los 40 estudiantes en bachillerato, cuando lo máximo debería ser de 35, y de 35 en la secundaria obligatoria (ESO) sobrepasando los 30 establecidos.

En la misma línea, para el próximo curso 2011-12 se prevén nuevos recortes de grupos en algunas asignaturas de la formación profesional (FP), como ya ocurrió en este curso que termina.

Otra preocupación de los directores es que en la conselleria se les está obligando a cerrar la planificación de este nuevo curso. "No es legal firmar actas de evaluación sin tener el curso terminado" indicaron.

Por su parte, la Junta de Personal Docente no Universitario de València aprobó ayer varias resoluciones, como la retirada del borrador del decreto sobre plurilingüismo, además del rechazo a los recortes en educación, la agilización del pago de los gastos de mantenimiento de los centros, la ampliación de la oferta de formación profesional, la regulación de la jornada escolar flexible y de un "concursillo" para conciliar la vida laboral y familiar del profesorado, entre otras cuestiones.