Los políticos se han convertido en un problema para los ciudadanos. La falta de respuestas a la crisis y sus constates enfrentamientos partidistas unidos a numerosos escándalos de corrupción sitúan a este estamento de la sociedad entre los menos valorados. Pero si algo hay que reconocer a los gestores públicos en los últimos años es su apuesta por intentar erradicar una de las peores lacras de la sociedad, los accidentes de tráfico que todos los años se llevaban por delante a más de 5.000 personas en España, 500 sólo en la Comunitat Valenciana.

Esta apuesta centrada en campañas de concienciación y control del tráfico y mejoras de las infraestructuras ha conseguido rebajar la siniestralidad en las carreteras valencianas y españolas a más de la mitad. Según el último informe sobre Siniestralidad Vial de la Dirección General de Tráfico que contempla los datos de 2010, en la Comunitat Valenciana ha habido un descenso del 19 % de fallecidos en accidentes de tráfico, un 58 % menos si lo comparamos con el año 2001. Esto significa que sólo en las carreteras de la autonomía han muerto 299 personas menos respecto a hace 11 años.

El informe, que otorga unos buenos resultados a la políticas de tráfico del Gobierno central, estuvo colgado varios días en la página web de la Dirección General de Tráfico (DGT) y fue retirado. Desde el 28 de octubre ya vuelve a estar a disposición de los ciudadanos. El estudio consta de más de 50 páginas que, entre otras conclusiones, revela que 56 personas murieron en 2010 en zonas urbanas de la Comunitat Valenciana.

Estas cifras representan un descenso del 25 % en el número de víctimas respecto a 2001 aunque, si se le quiere achacar alguna crítica, la valenciana es la autonomía que menos desciende en número de fallecidos en los cascos urbanos. Baleares o Madrid han conseguido que mueran la mitad de conductores en accidentes por sus pueblos y ciudades. También Cataluña o Galicia han bajado estos ratios por encima del 40 %.

Respecto al total de fallecidos en accidentes de tráfico en la Comunitat Valenciana se sitúa en la media española, tanto en número como en reducción de la siniestralidad. En 2010, murieron 213 personas en las carreteras valencianas. Si se compara con los años anteriores hasta 2001, se aprecian ligeros aumentos hasta 2003. Desde ese año hasta la actualidad el descenso en número de muertos es espectacular, casi 60 menos todos los años, según el informe.

Eso sí, los descensos tan acusados cada vez serán más difíciles de conseguir puesto que las cifras de muertos son cada vez menores. Y es que en 10 años se ha conseguido evitar 3.000 muertes al año en todo el Estado, una buena cifra que demuestra la gravedad del problema que parece se está atajado, no sin pocos esfuerzos de la administración y que hubiera sido difícil sin el convencimiento de los propios conductores. A estas cifras hay que añadirles un handicap que las hacen todavía más valiosas, y es que mientras los accidentes en España han descendido un 55 % en 10 años, el parque móvil ha aumentado en un 33 %, lo que significa más de 7 millones de coches circulando hoy en comparación con el año 2000.

El informe sobre Siniestralidad Vial también baraja cuáles son las principales causas de muertes en las carreteras valencianas. Las distracciones al volante, el exceso de velocidad y el alcohol ocasionan casi el 90 % de los accidentes de tráfico con fallecidos. El uso del teléfono móvil al volante continúa siendo uno de los caballos de batalla de la DGT.

La distracción, principal factor

La distracción aparece como factor concurrente en un 39 % de los accidentes. En carretera la falta de atención se presenta como causa en un 45 % de los casos y en zona urbana en un 33 %. Uno de los motivos que conlleva la distracción del conductor es la utilización del teléfono móvil durante la conducción. En el año 2010, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil formuló 116.540 denuncias por utilización del teléfono móvil en España, esta cifra supone un 16% menos que el año anterior.

En el año 2010, el 31 % de los fallecidos en accidente de tráfico superaba el límite de alcohol permitido en sangre. Además, según fuentes del Instituto Nacional de Toxicología, en el 18,47 % de estos casos los conductores analizados también dieron positivo por drogas.

Entre 2001 y 2010, se han realizado cerca de tres millones más de pruebas preventivas de alcoholemia, reduciéndose a la mitad la tasa de positivos. En el año 2001, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizó 1.602.648 pruebas preventivas resultando positivas el 5 %. En 2010, el número de pruebas preventivas realizadas fue de 4.550.000, resultando positivas el 1,8 %. En cuanto a las pruebas de alcoholemia realizadas en 2010 a causa de un accidente, fueron positivas el 5,5 % y el porcentaje de positivas por comisión de alguna infracción fue del 1,1 %.

Por su parte, según el informe de la DGT, la velocidad inadecuada está presente en el 13 % de los accidentes con víctimas ocurridos en 2010 y este porcentaje se eleva al 20 % cuando sucede en carretera (un punto menos que en 2009). En el caso de los accidentes mortales, en un 27 % de ellos se apreció que la velocidad fue un factor concurrente.

El pasado año, respecto de 2001, en autopista se observa que el porcentaje de accidentes en los que se apreció velocidad inadecuada ha descendido 2 puntos, en autovía permanece igual y en las vías convencionales ha bajado 4 puntos en el citado periodo.