La colaboración internacional que bajo las siglas Opera informó haber detectado neutrinos viajando a una velocidad ligeramente superior a la de la luz, ha vuelto a repetir el experimento que ha removido uno de los pilares de la Física, la Teoría de la Relatividad de Einstein. Para ello ha modificando los haces de partículas que envía el CERN desde Ginebra hasta el laboratorio subterráneo de Gran Sasso (Italia). Y han vuelto a obtener los mismos resultados.

Así lo explicó ayer en valencia el físico Pasquale Migliozzi, portavoz adjunto de Opera. Según el investigador esto elimina la principal crítica que se le hacía al experimento, la falta de precisión en determinar el momento en el que parten las partículas desde el CERN. Aún así, hay que esperar que otros experimentos como Minos en Estados Unidos o T2K en Japón confirmen o desmientan este resultado para pensar en un auténtico descubrimiento.

Migliozzi, investigador del Instituto Nacional de Física Nuclear italiano (INFN) en Nápoles y portavoz adjunto de Opera ofreció ayer una conferencia en el Instituto de Física Corpuscular (IFIC), centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universitat de València, donde explicó los nuevos resultados hechos públicos la semana pasada.

Los científicos de Opera han dispuesto de haces de partículas más cortos y más espaciados en el tiempo -paquetes de partículas de tres nanosegundos de duración separados por más de 500 nanosegundos- que en las mediciones anteriores, lo que según el físico italiano, ha permitido al experimento ganar en precisión.

Para Migliozzi, estos cambios, junto a una menor intensidad energética del haz, han motivado que solo hayan obtenido 20 eventos (mediciones de neutrinos), cuando en el anterior análisis utilizaron unos 15.000. Sin embargo, "la precisión es mayor, porque conocemos con un mayor detalle cuándo se producen los neutrinos". Según Migliozzi, la colaboración pretendía hacer estas modificaciones el próximo año, pero el CERN les ha facilitado estos haces "en cuestión de semanas". Tras los nuevos resultados de Opera, "hemos eliminado la principal crítica" que se le ha hecho al experimento, asegura.

Sin embargo, hay otras fuentes de error que la colaboración quiere mejorar en el próximo año. Una de ellas es usar un sistema de sincronización independiente al GPS, aunque, según el investigador italiano, multitud de organismos internacionales de medida han refrendado el sistema utilizado por Opera, por lo que "pensamos que el error no está en el GPS". Otra de las modificaciones importantes que quiere hacer Opera es mejorar el conocimiento de la distribución de los protones que producen los neutrinos en el CERN. Esto se pretende hacer mediante un detector cercano que mida de la distribución de muones, otro tipo de partícula que se produce a la vez que los neutrinos. Este cambio servirá también para mejorar la precisión de la medida, aunque solo una medición por un experimento independiente confirmará estos resultados.