El encargado de la tienda Forever Young, donde Francisco Camps y Ricardo Costa adquirieron supuestamente prendas de vestir pagadas por la trama "Gürtel", ha revelado hoy que la empresa Orange Market ordenaba a este establecimiento alterar las facturas para ocultar los productos reales que había adquirido.

Según ha contado Javier García en su declaración como testigo ante el jurado, los empleados hacían estas facturas siguiendo las órdenes de Cándido Herrero, el consejero delegado de Orange Market, la filial valenciana de la trama, y contaban con la autorización del director de la tienda, Antonio Fresno, y del jefe de ventas, José Tomás.

Además, el testigo ha admitido que una cuenta pendiente de 30.678 euros bajo el nombre del número dos de la trama, Pablo Crespo, y del también integrante de la misma Álvaro Pérez "el Bigotes", que incluía prendas supuestamente adquiridas por Camps, Costa, Víctor Campos y Rafael Betoret, fue saldada por tres empresas de la red, entre ellas "Servimadrid" y "Diseño Asimétrico".

Respecto a las facturas, Javier García ha contado que Cándido Herrero les indicaba los conceptos que debían poner y las empresas a la que debían emitirse, y que incluso existían borradores para confeccionarlas, pero siempre correspondían a ventas "reales" y a pendientes de pagos.

El jurado ha podido ver una factura de 19.800 euros emitida a nombre de Orange Market que incluye, entre otros conceptos, veinticinco trajes para los empleados de un expositor en la Feria Internacional de Turismo, y un metraje de tela blanca para tapizar, producto que no vende esta tienda.

El 17 de junio de 2008, el testigo recibió un correo electrónico procedente de Cándido Herrero en el que se le indicaba los conceptos que debía poner a determinadas facturas que iban a ser pagadas por Orange Market.

García, que ha declarado durante cerca de cuatro horas y que ha asegurado que no conoce a ninguno de los acusados, no sabe si en el momento de hacer esta factura, para la que se siguieron tales indicaciones, se había hecho pago alguno.

José Tomás le dijo que no se "preocupase" por los conceptos que tuviera que poner y añadió, textualmente, "haz esta factura con los términos que te den porque ya sabes que tengo un problema con los pagos a cuenta y hay que saldarlos lo antes posible".

El encargado de la tienda, que anteriormente también trabajó en Milano, admite que tuvo "problemas" con estas facturas, porque no le "cuadraban" con los importes que había en la carpeta de pendientes de pago.

El tribunal popular ha visto otra que suma 30.678 euros, en la que se atribuían aproximadamente diez mil euros a Crespo y a Pérez, y el resto se repartía en diferentes cantidades a nombre de los cuatro procesados en esta causa: el expresident de la Generalitat Francisco Camps, el ex secretario regional del PP Ricardo Costa, el exvicepresidente del Gobierno valenciano Víctor Campos, y el ex jefe de gabinete de la Conselleria de Turismo Rafael Betoret.

Según ha terminado reconociendo el testigo ante la insistencia del letrado de la acusación particular y del juez para que precisara sus respuestas, ha dicho que esta cuenta fue saldada progresivamente por tres empresas de la trama. "No era nada habitual que en una nota se pusiera un nombre y el producto fuera para otra persona", ha señalado previamente a preguntas del Ministerio Fiscal.

García también ha contado los problemas que tuvieron los empleados de esta tienda con el propietario, Eduardo Hinojosa, ya que tres de ellos fueron despedidos en el primer trimestre de 2009. Entre ellos se encuentra el sastre José Tomás, despedido "por el tema de las facturas falsas y los conceptos", según la opinión del testigo, y a quien un juzgado dio la razón declarando su cese como improcedente. Tomás mantiene otros dos litigios con el propietario de Forever Young relacionados con la alteración de las facturas del establecimiento.