El ex secretario general del PSPV Jorge Alarte explicó a este diario, a las 48 horas de perder el congreso de Alicante, que su actitud respecto a la nueva dirección iba a ser, en todos y cada uno de los congresos, de máxima colaboración. "Con Ximo Puig", matizó, para dejar claro que su promesa de lealtad se circunscribía únicamente al secretario general y no alcanzaba a Francesc Romeu, ni a Leire Pajín, ni a Ciprià Císcar, jefes de las principales tribus cuya alianza elevó a Puig a los altares. Las dos citas congresuales abiertas -la provincial y la de la ciudad de Valencia- han constatado que, efectivamente, Alarte se ha alineado con los aspirantes avalados por Puig: José Luis Ábalos y Joan Calabuig.

El exlíder asintió cuando el secretario de organización, Alfred Boix, lo puso al corriente de que Ábalos era la apuesta provincial oficial en un pacto de doble recorrido que, en la capital, postulaba al lermista Joan Calabuig. En realidad el visto bueno lo dio Jorge Alarte Gorbe casi a título personal. No hizo la más mínima gestión para movilizar tropa por la causa de Ábalos. Ni, por supuesto, ha intentado disuadir al alcalde de Faura y persona próxima a él, Toni Gaspar, para que no se presentara como alternativa. Alarte, en su estrategia de cumplir personalmente con Puig sin fortalecerlo demasiado de cara a primarias, no reunió a sus huestes para colegiar la decisión, lo que molestó, entre otros, a Gaspar.

La circunstancia de que haya dos candidatos al provincial ha evidenciado la dispersión, más que fractura, entre los dirigentes que apoyaron y acompañaron a Alarte hasta el mismísimo cadalso en Alicante. Ábalos movilizará a la minoría mayoritaria que controla en la ciudad a favor de Calabuig a cambio de que los afines a Puig lo apoyen para secretario provincial. Es la vía elegida para sumarse a la mayoría que en el congreso de país dio la victoria al alcalde de Morella. Esa misma apuesta de sumarse al proyecto de país la comparten quien fue el responsable de finanzas del partido con Alarte, José Ruiz, o Josep Maria Àngel, alcalde de l'Eliana, senador territorial y exmiembro de la ejecutiva alartista.

La mejor constatación de la ausencia de una unidad de acción entre los líderes que fueron afines al exinquilino de Blanquerías es que estos dos exmiembros de la ejecutiva están en posiciones distintas a las de José Mayans y al exalcalde de Burjassot José Luis Andrés Chavarrías, quienes han formado hasta ahora dúos en perfecta armonía con Àngel y Ruiz, respectivamente. Mayans y Chavarrías apoyan a Gaspar.

Carmen Martínez, con Gaspar

La todavía líder provincial y alartista de pro, Carmen Martínez, trabajara a destajo a favor del portavoz socialista en la diputación.

El ex secretario general de la ciudad, Salvador Broseta, también se suma a Puig por la vía de apoyar a Calabuig, quien tendrá enfrente a Ricardo Campos, que ayer anunció su candidatura, postulado por la plataforma Esperanza Socialista.

En su presentación, Campos se definió como "un indignado con el PP y un insatisfecho con mi partido". Su objetivo es que el partido "comience a hacer bien su trabajo, conecte con la ciudadanía y gane las elecciones". Los veinte años de gobierno de Rita Barberá los considera el "paradigma del despilfarro, de la deuda y del desempleo".