El Juzgado de lo Social número 37 de Madrid ha declarado procedente el despido de un piloto de Air Europa por conducta "especialmente grave", después de que en un vuelo Valencia-París informara a los pasajeros de que la avería sufrida era la misma que causó el accidente de Spanair en Madrid en agosto de 2008 y en el que murieron 154 personas, lo que provocó que 40 viajeros se negaran a subir a bordo, y supuso que le fuera retirada la confianza como comandante, tras lo que amenazó a la empresa.

En la sentencia, dictada el pasado 4 de septiembre, la juez María Romero-Valdespino declara justa la causa del despido del piloto, con una antigüedad en la aerolínea de 17 años, como consecuencia de "una conducta de especial gravedad y trascendencia" y desestima el recurso del piloto.

Con anterioridad, el piloto había sido sancionado con suspensión de empleo y sueldo por falta muy grave en 2004, confirmada como grave judicialmente, y se le habían impuesto otras tres sanciones por faltas leves en 2007 y 2008. Días después de la apertura del expediente sancionador el piloto envió por correo electrónico y publicó textos amenazantes para la compañía y sus directivos e imputaciones delictivas, así como supuestas irregularidades que "no han resultado acreditadas".

Estas imputaciones, razona la sentencia, "suponen una transgresión de la buena fe contractual y abuso de confianza", lo que constituye "una causa justa de despido".

Los hechos se remontan al 28 de septiembre de 2011, cuando en un vuelo de Air Europa, que cubría la ruta Valencia-París, el piloto detecta una avería en una pieza cuyo repuesto se encuentra en las instalaciones de la compañía en Palma de Mallorca, por lo que se decide volar a Palma para solucionar la incidencia y continuar vuelo a la capital parisina.

El comandante se dirigió a los pasajeros del avión para informarles de la incidencia y del regreso al aeropuerto de origen asegurando que regresaban porque el avión tenía la misma avería que el de Spanair que se estrelló en el aeropuerto de Barajas en agosto de 2008, y en el que fallecieron 154 personas fallecidas y 18 resultaron heridas.

La compañía le abrió un expediente disciplinario a raíz del desafortunado comentario y con fecha del 27 de octubre de 2011 pasó a ejercer como copiloto o segundo, manteniendo los derechos y condiciones laborales de dicha categoría.

Publicidad en un medio digital

En días posteriores, 7 y 9 de noviembre de ese misom año, el piloto envío sendos correos electrónicos sobre supuestas irregularidades por parte de la empresa, que fueron contestadas, y publicó en un medio digital un documento al respecto.

Previa incoación del expediente, Air Europa comunicó al piloto la suspensión de actividad el 15 de noviembre de 2011, mientras tramitaba el expediente disciplinario, y finalmente el 21 de noviembre de ese año fue despedido por los mismos motivos. Decisión de la empresa que el piloto recurrió.

El despedido dice que es una "represalia"

En su defensa, el piloto de Air Europa despedido alegó que la extinción contractual se produjo como "represalia" por anteriores demandas, principalmente por la impuesta por la retirada de su cargo como comandante. El fallo del juzgado de lo Social número 37 de Madrid determina que fue posterior al inicio de un expediente disciplinario y que la compañía tuvo en cuenta que el piloto fue sancionado con anterioridad en cuatro ocasiones, además de haber retirado la confianza como comandante en 2005 además de poco antes del despido. Ante la sentencia cabe interponer recurso de suplicación al Tribunal Superior de Justicia. e. p. madrid