Los enfermos en lista de espera quirúrgica van en la Conselleria de Sanidad a más, como las deudas acumuladas. El departamento que gestiona Luis Rosado hizo públicas ayer las temidas cifras de la demora quirúrgica, un lobo con los colmillos bien afilados y prietos se han custodiado siempre con firmeza y no es para menos porque en el primer semestre de este año las cifras han ido a peor. De los 42 días reconocidos de demora que se registraron a finales de 2011 a los 56 que se contabilizaron en junio de este año. Una diferencia de 14 días o dos semanas lo que supone un aumento del 33 %.

La suspensión paulatina del plan de choque durante los últimos años al pasar en el primer recorte de 22 millones a 11 y posteriormente suspender la última asignación de 6 millones se ha traducido en lo que Levante-EMV adelantó el 31 de julio, al anunciar que se habían cancelado unas 30.000 intervenciones que se sumaban a la lista de espera.

El resultado de ese ahorro revierte directamente en los pacientes que están pendientes de un intervención quirúrgica que a finales de 2011 eran 27.516 y seis meses después se estiraron hasta los 42.123 enfermos, lo que supone un crecimiento de un 53 % en solo seis meses.

Las especialidades que acumulan las bolsas más voluminosas de pacientes son Traumatología (10.482), Oftalmología (7.064), Cirugía General y Digestiva (6.351), Otorrino (2.468) y Urología (1.920).

Sin embargo las especialidades que más días de demora tienen son Cirugía Plástica con 81, Cirugía Pediátrica con 67, Oftalmología con 63, Traumatología con 61 y Neurocirugía con 57, que son los datos de promedio que ayer dio a conocer la conselleria porque, luego, cada hospital tiene sus propias listas y sus propios tiempos de espera, que pueden ser mayores de los apuntados.

8.469 enfermos de cataratas

Por patologías, las personas que están pendientes de que les llamen para someterse a una operación de cataratas son ya en si mismas una lista de espera al completo, ya que son en total 8.469, sumando los tres tipos de demora (de 0 a 90 días, hasta 180 días y de más de este tiempo), casi todos ellos de edad avanzada que han perdido la vista. Este enorme volumen de pacientes, que representa la quinta parte de todos los que se reconocen en lista de espera, es una consecuencia de la supresión del plan de choque que se realizaba en clínicas privadas y en la propia Fundación Oftalmológica del Mediterráneo con la que también se suprimieron los convenios.

La solución que se arbitró en enero para contrarrestar la desaparición de estas intervenciones en los centros privados fue que había que "apretar" los partes quirúrgicos, es decir que si por ejemplo se hacían tres en una mañana, a partir de principios de año se tenían que hacerse una o dos más para rentabilizar al máximo las sesiones.

La idea de ampliar la cirugía a las tardes, que han defendido la mayor parte de los gestores y que era una de las soluciones para aligerar la lista de cataratas, entre otras, se ha implantado siempre a medio gas al no disponer de recursos.

Casi tres mil personas con hernia inguinal

Los datos de la lista de espera basculan entre dos direcciones: los días de demora y el número de pacientes por patología. En este apartado hay que señalar que los enfermos que están a la espera de que se les implante una prótesis de cadera o de rodilla que son 819 en el primer caso -sumados todos los tiempos- y 1.487 en el segundo, son los más castigados por la supresión del plan de choque ya que en ambos casos tendrán que esperar un promedio de 85 y 92 días para operarse. Los que están pendientes de operarse una hernia inguinal que son 2.740 tienen por delante 70 días con suerte si no son mas.