Un equipo internacional formado por expertos del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentación (INIA), del Instituto para la Protección de las Plantas (IPP) de Florencia y de Imelsa ha tomado muestras de los cipreses de los campos experimentales de la Diputación de Valencia que resistieron el paso de las llamas durante el incendio que se produjo en Andilla el pasado mes de julio. Las muestras se analizarán en el laboratorio del INIA para profundizar en el conocimiento de la inflamabilidad y propiedades de la combustión de algunas variedades de ciprés para su posible aplicación en materia de prevención de incendios forestales.
El doctor Gianni Della Roca, del Instituto para la Protección de las Plantas (IPP) de Florencia, destacó que lo ocurrido en estas parcelas "no es un caso aislado, puesto que ya se han observado comportamientos similares en Italia y Turquía". "Esto nos ha animado a continuar con los estudios de laboratorio", agregó.
El investigador también apuntó que "gracias al apoyo de la Diputación, la provincia de Valencia será el primer lugar del mundo en instalar barreras verdes de ciprés en puntos estratégicos del monte, para continuar en los análisis de su comportamiento y de su posible viabilidad como método de prevención de incendios".
Tras el incendio de Andilla, se constató que el 90 % de los ejemplares de estos campos no entraron en combustión -946 cipreses de distintas especies con altura de hasta nueve metros- y se quedaron rodeados de fuego, mientras la vegetación colindante quedó completamente calcinada.
