La alcaldesa de Valencia, Rita Barbera, devino ayer en punta de lanza de la rebelión de los ayuntamiento contra el copago en los centros y residencias de discapacitados. El pleno del Ayuntamiento de Valencia aprobó ayer por unanimidad una moción en la que se acordó no aplicar el copago en los centros ocupacionales municipales de atención a la discapacidad y pedir a la Generalitat que revise el decreto 113/2013 en el que se estipula el copago. Barberá aseguró que, en todo caso, el ayuntamiento aplicará la ley pero el ayuntamiento seguirá asumiendo los gastos en sus centros de discapacitados.

La moción pidiendo la retirada del copago fue presentada por el PSPV y modificada por el PP, que presentó una alternativa que coincidía en lo fundamental con la de los socialistas lo que propició el acuerdo de todos los grupos.

La moción aprobada en el Ayuntamiento de Valencia contempla «seguir prestando los mismos servicios en centros ocupacionales municipales sin aportación económica alguna de los usuarios, manteniendo las actuales condiciones en los demás centros municipales destinados a las personas con discapacidad».

La concejal socialista en el Ayuntamiento de Valencia, Anaïs Menguzzato, señaló que «el copago es una losa más para los dependientes, que se añade a la de los fármacos, los productos ortoprotésicos o los impagos al personal de los centros». La concejal de Bienestar Social, Ana Albert, recriminó a los socialistas haber aprobado una ley de Dependencia «insostenible» y sin dotación presupuestaria.

Además de Valencia, otras corporaciones han aprobado en los últimos días mociones encaminadas a enmendar el decreto del copago. Cullera aprobó el pasado jueves una moción para pedir la anulación del copago que aprobó el Consell para los usuarios de los centros de discapacitados. Esta petición, que había sido presentada en un principio por el PSOE y Compromís, también la acabó firmando el PP, con lo que contó con el voto positivo de las tres formaciones políticas.

Carcaixent pide la revocación

El portavoz del PSOE en Cullera, Jordi Mayor, no sólo pidió que el Consell anule el copago, también solicitó que, si el gobierno de Alberto Fabra persiste en su intención, el Ayuntamiento de Cullera asuma el aumento de las cuotas de los usuarios.

Por su parte, el Ayuntamiento de Carcaixent, donde gobierna el PP con el apoyo del único concejal del PSD, aprobó el jueves una moción institucional que reclama revocar y dejar sin efecto la resolución del Consell y que se revisen los criterios de participación económica de los beneficiarios en las prestaciones a la Dependencia.

En la misma línea, el Ayuntamiento de Xirivella y el de Paterna, ambos con gobiernos del PP, han votado en contra del copago para los discapacitados. El decreto de la Generalitat por el que se regula el copago de los dependientes discapacitados sigue levantando ampollas en los ayuntamientos de l'Horta, incluso en los gobernados por el PP con mayoría absoluta.

El alcalde de Xirivella, Enrique Ortí, ha presentado una moción para exigir a la Conselleria de Bienestar Social que retire la medida. La moción fue apoyada por todos los grupos de la corporación.

En Paterna, en el pleno de esta semana, el gobierno del PP también respaldó una moción presentada por Compromís en la que se exigía la retirada de este decreto.

Por su parte los populares de Mislata sí parecen haber aceptado que el gobierno autonómico no puede asumir esos 15 millones y por ello piden que el ayuntamiento asuma el pago de lo que se exige a los dependientes.

Por su lado, el PP de Sagunt dejó claro ayer mismo que va a «hacer esfuerzos» para que la Generalitat «revise» el copago a los dependientes y acordó en junta de gobierno que el ayuntamiento se hará cargo de aportar estas cantidades a las familias necesitadas. La medida fue adoptada después de que los populares saguntinos se negaran a apoyar en el pleno las propuestas presentadas por un lado por EU y por otro, desde PSOE y Compromís, para reclamar la retirada de la decisión.

El PP de Faura fue más allá y, junto a los socialistas y ERPV, apoyó un texto que exigía la derogación del copago.