Los dos millones y medio de documentos históricos sobre los papas Borja que en 2007 fueron trasladados a Valencia procedentes del Archivo Secreto Vaticano han abandonado ya la Comunitat Valenciana, según anunció ayer el Institut Internacional d'Estudis Borginas, organismo cultural que custodia los archivos digitalizados adquiridos bajo el patrocinio de la Fundación Winterthur. Todo apunta a que el nuevo destino de los archivos, oficialmente no desvelado hasta el próximo lunes en una esperada rueda de prensa, se encuentra en alguna ciudad de Cataluña, territorio con el que el centro borgiano ha trabajado intensamente en los últimos años.

El motivo del traslado, según adelantan los propietarios de la documentación, es el «desinterés de las instituciones», porque «después de siete años de dirigirse ininterrumpidamente a las instituciones valencianas para que colaboren en el estudio de estos fondos», nunca han encontrado «ni una respuesta positiva».

El instituto solicitaba ayudas para contratar a investigadores que trabajaran esta ingente documentación inédita sobre los pontífices de Xàtiva Alejandro VI y Calixto III. Ahora, en cambio, los documentos dejan Valencia «para ir a otro lugar donde sí podrán ser estudiados», adelanta el Institut Internacional d'Estudis Borgians. Hasta el momento, los casi 500 volúmenes que conforman el archivo se custodiaban en las dependencias del Octubre Centre de Cultura Contemporània de Valencia, sede del instituto borgiano.

En la rueda de prensa del lunes se explicarán las causas del traslado y se enumerarán, asimismo, todas las gestiones infructuosas realizadas con la Generalitat, la Diputación de Valencia y algunos ayuntamientos simbólicos para la familia valenciana más universal, como Xàtiva (cuna de los pontífices) o Gandia (ducado que en 1485 compró el cardenal Rodrigo de Borja, futuro Alejandro VI, y patria natal de San Francisco de Borja). Las razones del traslado las aportarán Eliseu Climent, secretario del Institut Internacional d'Estudis Borgians, y Antoni Furió, medievalista de la Universitat de València.

Entre los fondos documentales contenidos en el archivo de los Borja, como se destacó a su llegada en 2007, destacan materiales referidos a aspectos poco investigados sobre los dos pontífices, cubiertos por la leyenda negra que la ficción ha logrado imponer sobre la investigación histórica.

En los documentos se puede obtener más conocimiento sobre la dimensión espiritual de los Borja reflejada en los escritos; su entorno cardenalicio, formado por los hombres que les acompañaron desde tierras valencianas en aquel siglo XV y que conformaron su corte bajo críticas de nepotismo; su administración de la economía vaticana; su labor de mecenazgo; las bulas alejandrinas que cedían a los Reyes Católicos las tierras descubiertas más allá del Atlántico a condición de que fueran evangelizadas; o las cartas privadas de Alejandro VI y sus hijos. Todo ello escapa ahora de la Valencia que los vio despegar y que sigue trufada de vestigios suyos.