La maquinara del turismo funciona a pleno rendimiento en la Comunitat Valenciana. Después de un mes de junio satisfactorio para las principales áreas de negocio estival que pivotan en torno al sector, julio ha cerrado con unos datos que invitan aún más al optimismo y confirman la recuperación del volumen de negocio anterior a la crisis. La principal patronal hotelera de la Costa Blanca, Hosbec, apunta a un incremento porcentual de hasta cinco puntos respecto al mismo mes de 2014 en los niveles de ocupación, que alcanzan una media del 94% en los establecimientos de la zona. Antonio Mayor, presidente de la organización, habla de un mes «histórico» y de una «temporada de récord» en una de las costas con más fluencia turística. «Hay que retroceder a 15 años atrás para encontrar algo parecido», observa.

La mejoría económica, unida a la pérdida de atractivo de otros destinos vacacionales del Mediterráneo, influyen en esta percepción. El tirón del turismo nacional y británico y unos precios asequibles terminan de conformar la cuadratura del círculo. El presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Castelló (Ashotur) se suma al clima de optimismo. Esta provincia también ha concluido julio con un incremento del turismo que se sitúa entre el 4 y el 5% respecto a las mismas fechas del año anterior, unas cifras que, según subraya Carlos Escorihuela, rebasan las expectativas iniciales.

La tónica para el mes de agosto se antoja similar. «Tenemos un nivel importante de reservas y faltan todavía las de última hora. Si la climatología no nos lo impide, vamos a llegar a cifras de ocupación muy elevadas». Escorihuela pronostica un indicador del 95%, que podría alcanzar el 98% en algunas localidades.

Las exitosas previsiones planteadas al inicio del verano se están cumpliendo al milímetro y el sector turístico atraviesa la sensación de estar embarcado en otro ciclo. «La confianza y el consumo están reactivado el mercado interior, desaparecido durante siete años. Por primera vez, la gente está saliendo sin miedo a gastar», expone Vicente Pizcueta, experto en marketing turístico. Aunque el desembolso procedente de los turistas del interior de España aún no alcanza niveles de 2007, Pizcueta coincide en poner sobre la mesa un «escenario de récord» este año como consecuencia de la llegada de cada vez más visitantes procedentes del extranjero. La crisis internacional en materia de seguridad ha pasado factura a mercados directamente competidores. El incremento del negocio es especialmente significativo en la provincia de Alicante. «Cuando la confianza en el consumo estaba bajo mínimos teníamos turistas cuyo gasto se limitaba a los supermercados. Ahora la gente ya consume fuera de casa y el indicador de la riqueza comienza a expandirse», añade el experto.

Altas expectativas en agosto

En la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia se muestran más cautos en torno al balance del mes de julio. Aunque el consumo ha repuntado, José Palacios, vicepresidente de la entidad, apunta a una tendencia similar en el número de visitantes respecto a años anteriores. El sector deposita muchas más expectativas en este mes de agosto, cuando se produce un incremento del gasto. Partiendo de la base de que agosto de 2014 fue, según Palacios, «el mejor de los últimos años», éste vaticina que el actual «será aún mejor» vista la tendencia seguida.