La Marcha por la Dignidad volvió ayer a ser protagonista en las calles de Valencia. Organizada por diversas entidades, el objetivo es el mismo que era: «visualizar el robo de las conquistas sociales de las clases populares». Por ello, bajo el lema de «pan, trabajo, techo y dignidad», centenares de personas participaron en la protesta de Valencia para pedir, una vez más, «una transformación política y social». La paciencia hace mucho tiempo que les acabó.

Y es que tras las últimas movilizaciones multitudinarias «nada ha cambiado». «Las consecuencias de la crisis se siguen agudizando con las políticas de recortes impuestas por la troika contra la mayoría social trabajadora», aseguraban ayer.

Y daban un paso más: «Nos dejan sin trabajo, sin casa, sin sanidad, sin pensiones, sin educación, sin estudios, sin futuro y sin vida». En la Marcha por la Dignidad que se celebró ayer hubo todo tipo de pancartas, gritos y lemas reivindicativos ya que los colectivos quisieron hacer visibles sus protestas en una marcha que aglutina «el malestar y la indignación general de la población».