El ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, apostó ayer por seguir trabajando en la prevención de la violencia de género entre los jóvenes, y defendió un pacto de Estado social y político si existe «lealtad» en su planteamiento. El ministro aseguró que la violencia machista «es una política de Estado y un problema global, en el que la sociedad no quiere divisiones».
«Por tanto, a nosotros, si hay lealtad a la hora de plantearlo, nos parece bien que todos los partidos apelen a que quieren un acuerdo de Estado», dijo Alonso, tras matizar, eso sí, que el Gobierno no ha visto esa voluntad cuando se ha ejercido «una oposición muy dura plagada de descalificativos» controlados por sus parejas.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, presidió ayer, por primera vez, el acto institucional de conmemoración del día internacional de la eliminación de esta lacra. Rajoy aseguró que «la unidad y el consenso» son la clave de la lucha contra la violencia de género, en la que estamos «todos juntos», y animó a las mujeres a romper el círculo del maltrato porque «hay salida».
Sin embargo, el presidente del Gobierno lleva dos años negándose a firmar un pacto de Estado.
