No hay marcha atrás en las intenciones de Xavier Rius, ni en el nombramiento de Vicent Flor como director de la Institució Alfons el Magnànim ni en los términos de su contrato (un salario superior al de Ximo Puig). Ayer reconoció en un desayuno con los medios de comunicación en el MuVIM que accederá a convocar el consejo de administración, un paso eludido cuando se impulsó el proceso de elección por concurrencia pública y lo que provocó la ofensiva del PP para tumbar el concurso, pero para él es un retoque estético a posteriori, un mero trámite en el que se aprobará al candidato ya elegido y su salario, a no ser que el PSPV se una a los populares en una enmienda a la totalidad.

El diputado provincial de cultura, de Compromís, reivindicó el concurso convocado para elegir al nuevo rector de la IAM. «Si tengo que recibir críticas por hacer las cosas más transparentes, son bienvenidas», se enrocó ante quienes han censurado el procedimiento, esgrimiendo que en el sector de la cultura «hay muchos egos» y que «igual algunos se han quejado después de la elección por ver si los elegidos eran ellos». Antes del concurso, ironizaba Rius, recibió «llamadas de gente importante en la cultura que pedían que se les nombrara como nombraba el rey Arturo».

Rius también contraatacó al PP («antes estos procesos se hacían a dedo») y elevó la defensa del proceso a todo el contrato de Vicent Flor, sentado junto al diputado y silente durante toda la intervención. Así, defendió que si el nuevo director de la IAM cobra más que el presidente de la Generalitat (68.000 euros frente a 59.000 de Puig) es porque es lo que «corresponde a un jefe de servicio» y aseguró que es «mentira» que el anterior director cobrara menos que Flor.

Mientras Rius exponía su defensa en el MuVIM, la portavoz del PP en la Diputación, Carmen Contelles, presentaba un recurso de reposición contra el decreto de nombramiento de Flor, lo que hizo reaccionar al presidente del organismo provincial, Jorge Rodríguez, del PSPV. Según ha podido saber este diario, durante la misma mañana, Rodríguez llamó a Contelles para buscar una solución al entuerto y la única oferta de la popular fue que, en el consejo de administración (probablemente el próximo 2 de febrero) se revoque todo el procedimiento.

El presidente de la Diputación no dio una respuesta inmediata pero hasta el día del consejo valorará la opción, preocupado por que los populares acaben llevando el proceso por la vía judicial, lo que salpicaría al propio Rodríguez, quien en definitiva firmó el nombramiento.

En ese contexto es en el que Rius mantiene su postura como inamovible. Desde el área de Cultura se apunta que en ese mismo consejo no se puede enmendar una de los puntos de las bases de la convocatoria, lo que hubiera ayudado al PSPV a encontrar una vía intermedia: obligar a reducir el salario de Flor pero mantenerlo como director. Sin embargo, al estar el salario fijado en la misma convocatoria, lo único que cabría es que el consejo propusiera otro candidato, revocando por completo el concurso ya realizado, con lo que se tendría que indemnizar a Flor y empezar de nuevo desde cero.

«Hay quien me dice que sin lo de Egevasa esto no estaría sucediendo», dejó flotando Rius en el aire durante su conferencia.