Compromís presentó ayer en el Senado una propuesta para que los billetes de cercanías de la línea C-6, afectados por las obras de colocación del tercer carril para el Corredor Mediterráneo sean gratuitos mientras persistan los problemas actuales y que los trabajos se realicen unicamente en horario nocturno para eliminar las molestias a los usuarios.
Los senadores Carles Mulet y Dolors Pérez recordaron ayer que «autonomías como la catalana establecieron sistemas como la devolución exprés en caso de retrasos de más de 15 minutos» mediante la entrega de otro billete de la misma categoría, así como «la gratuidad en el transporte mientras duraron los problemas por las obras del AVE en Barcelona». En concreto, las líneas R2 Sud, R7 y R10 del último trimestre de 2007 hasta 9 mayo de 2008.
Como «solución intermedia», Compromís apuesta por la gratuidad del billete mientras durante los trabajos del tercer carril y asegura que otras alternativas como posibles bonificaciones del 50% en el precio del billete conllevan problemas técnicos, ya que ni las máquinas expendedoras ni el software permiten hacer esta discriminación temporal en la tarifas y se crea un conflicto con los transbordos entre líneas y zonas».
En el mismo sentido, la Generalitat Valenciana pidió ayer a Renfe «rapidez y agilidad para tramitar la petición de reducción del billete al 50 % y que sea gratuito cuando los retrasos superen los 30 minutos». La petición fue realizada en el seno de la primera reunión del grupo de trabajo, integrado por representantes de la Generalitat y Renfe, para tratar la problemática de la Línea de Cercanías C-6 , entre Valencia y Castelló, afectada por la ejecución de las obras del Corredor Mediterráneo.
La creación de este grupo fue uno de los acuerdos a los que se llegó en la reunión de la semana pasada entre el President de la Generalitat, Ximo Puig, y el Presidente de Renfe, Pablo Vázquez, a la que también asistió la Consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador.
El director general de Obras Públicas, Transporte y Movilidad, Carlos Domingo, trasladó a los representantes de Renfe la «necesidad» de ampliar el grupo de trabajo con representantes de ADIF, organismo del Estado que tiene encomendada la ejecución de las obras.
La conselleria tiene contar con ADIF para «tener información de primera mano sobre el estado y la programación de las obras del tercer carril que están llevando a cabo y que están provocando las incidencias en las cercanías», aseguró Carlos Domingo.
Sin fecha de finalización
El director general lamentó que a día de hoy el Gobierno central sea «incapaz de aportar ninguna fecha de finalización de las obras o informar sobre la programación a medio plazo lo que está provocando la falta de planificación en el servicio de viajeros que están sufriendo los usuarios».
Los representantes de la Generalitat insistieron en la necesidad de potenciar las frecuencias mediante autobuses lanzadera que conecten las estaciones de la linea con mayor demanda de viajes, tal y como se concluyó en la reunión que mantuvieron el president de la Generalitat y el de Renfe. Este refuerzo, consistente en aumentar el servicio durante las horas punta en diez expediciones adicionales cada día, se pondrá en marcha el próximo 29 de marzo, después del parón de las obras en Fallas y Pascua.
El Consell insiste en que se deben tramitar «con rapidez y celeridad» las peticiones que RENFE tiene que hacer ante el Ministerio de Fomento para que el precio del billete se reduzca en un 50 %, mientras los servicios de esta línea se encuentren afectados, y que, en caso de que se produzcan retrasos superiores a 30 minutos, «se provea gratuitamente al usuario de otro billete, ya que, la indemnización que en estos momentos existe se produce únicamente cuando el retraso es superior a 90 minutos».
