El centro tecnológico Ainia y el Instituto Tecnológico del Plástico Aimplas, ambos con sede en Valencia, trabajan juntos en el proyecto «Sostpack», con el objetivo de mejorar las propiedades de los materiales biodegradables para facilitar su incorporación al mercado del envasado de los alimentos.

Según ha informado Ainia, la producción mundial de materiales plásticos en 2013 fue de 290 millones de toneladas, de los cuales el 74% son derivados del petróleo, mientras que sólo el 0,2% corresponde a bioplásticos biodegradables.

Aunque en la actualidad existen distintos tipos de bioplásticos biodegradables con distintas aplicaciones para el envasado de alimentos, no han tenido la implantación esperada, debido a factores como son una menor vida útil del alimento envasado y mayor coste.

Con estos antecedentes, Ainia y Aimplas trabajan en el desarrollo de nuevas formulaciones para materiales biodegradables para que cubran un mayor número de necesidades en lo relativo a su aplicación en envases para alimentos.