A la universidad Cardenal Herrera CEU le va a costar más de 200.000 euros anuales el mantener a sus estudiantes de Ciencias de la Salud haciendo prácticas en el circuito de hospitales públicos. Esa es, al menos, la compensación económica que le va a requerir la Universitat de València que está contratando por vía de urgencia a otros 49 profesores asociados en centros hospitalarios públicos para tutorizar a los más de 260 alumnos procedentes de la Cardenal Herrera que no tienen plaza en centros privados.
La UV -junto a la UJI de Castelló, la Miguel Hernández de Elx y a la Universidad de Alicante- está canalizando el flujo de estudiantes de Ciencias de la Salud de las universidades privadas que han quedado «fuera de ordenamiento» después de que el nuevo Consell decidiera en junio que estos universitarios no iban a poder seguir haciendo prácticas en los hospitales públicos.
Los responsables de la Conselleria de Sanidad y Educación argumentaron que se estaban cometiendo «flagrantes irregularidades» al permitir que fueran las empresas privadas las que contrataran directamente a los profesionales de Medicina para tutorizar a sus alumnos aprovechando su tiempo como personal público y los recursos del Sistema Valenciano de Salud. Para evitarlo, se decidió que, a partir de este curso 2016-2017 los nuevos matriculados en Medicina, Enfermería, Psicología Clínica y Fisioterapia no iban a poder hacer prácticas en el circuito público pero se tenía que dar una solución a los ya matriculados.
El Consell dejó el encargo de organizar este «periodo transitorio» en manos de las universidades públicas que están cerrando contrarreloj convenio bilaterales con los centros privados para acoger a los universitarios de la privada y darles una solución hasta que terminen sus estudios. Eso sí, el trabajo se va a hacer a cambio de una compensación económica: el coste de los profesores «de más» que la universidad va a contratar. De esta forma, las universidades públicas dan la solución pero ni ganarán ni perderán dinero, más allá del tiempo y el trabajo invertido para hacer posible estos convenios.
Según informó ayer el Vicerrectorado de Profesorado de la UV, la universidad contratará a 49 profesores (la mayoría de medicina) para atender a 174 estudiantes de Medicina del CEU, 80 de Enfermería y 10 de Fisioterapia de sus facultades de Valencia y Castelló. El coste por curso de contratar a estos profesores asociados ronda los 4.300 euros por lo que el gasto adicional para el CEU solo en Valencia será de más de 200.000 euros.
A esa cifra habrá que añadir los profesores de más que se contraten a través de las universidades públicas de Castelló y Alicante aunque, en estos casos, los convenios iniciales están más retrasados y no se cuenta con cifras concretas.
Fuentes de la universidad privada explicaron ayer que el profesorado contratado por la UV será el grueso de la Comunitat ya que en la provincia «se imparten los grados de Enfermería, Fisioterapia y Medicina» y también se integran ahí estudiantes de Castelló que harán prácticas, por ejemplo, en Sagunt.
En Alicante, por ejemplo, «solo es necesario buscar plazas para los grados de Enfermería y Fisioterapia, en total pocas plazas porque disponemos de las plazas del Hospital Universitario del Vinalopó», concretaron estas fuentes. La universidad, en principio, no tiene intención de repercutir el gastos extra en las matrículas de los alumnos.
Hasta que estos profesores no estén contratados, los alumnos que hayan optado por seguir haciendo prácticas en centros públicos no podrán empezar, con el trastorno que esto supone para aquellos que están en sus últimos cursos.
La Universidad Católica ha iniciado ahora el mismo camino que el CEU y sus alumnos están todavía a la espera de tener plaza en centros públicos.
