El presidente provincial, Vicente Betoret, quita importancia a la victoria de su rival en la turbulenta junta provincial del miércoles en la que los partidarios de Contelles tumbaron por 24 votos su propuesta para el Comité Organizador del Congreso y dice que en ningún momento se ha planteado la dimisión. «Era un escenario que podía pasar», asegura Betoret. Considera que el resultado no es definitivo porque la junta provincial es heredada de su antecesor, Alfonso Rus, y él mismo no quiso renovarla. «No se cambió para no romper el partido en un momento complicado (la detención de Alfonso Rus) y esto le ha perjudicado», apuntan desde su entorno.

De momento, la nueva junta provincial, que debe decidir la fecha del congreso provincial, tardará en convocarse, al menos hasta que se rebaje la tensión que estalló el miércoles. Betoret pide disculpas por la imagen dada y se muestra disgustado por el griterío y los malos modos. Aunque fuentes cercanas aseguran que los partidarios de Contelles tenían la consigna de reventar la junta, el presidente provincial aún hace un llamamiento a la unidad: «Un partido roto no gana elecciones», dijo tras la tensa cita del miércoles pasada ya la medianoche.

Sus seguidores apuntan que Betoret, que cuenta con el apoyo de Génova para repetir al frente del partido en la provincia, es quien más cedió para alcanzar un acuerdo de integración con Contelles el miércoles en Madrid al darle más representación en el comité organizador, aunque la diputada lo rechazó para confiar su apuesta a la junta posterior, señalan.

Las ayudas a Contelles

En el entorno de Betoret también existe malestar por lo que consideran una ayuda de la dirección autonómica a su rival, Carmen Contelles, y añaden que el actual presidente juega en campo contrario. Defienden también que si se llega a un congreso de confrontación habrá que votar, aunque ven complicado el futuro ya que ambos candidatos ni han sido capaces de ponerse de acuerdo en el comité organizador, que al final será el árbitro del congreso y para el que Betoret propone para la presidencia a Juanvi Ruipérez.