La presión sobre el veterano politico del PP valenciano Pedro Agramunt aumenta en Europa. El vicepresidente de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE), Antonio Gutiérrez Limones, presidió ayer el acto que acogió el discurso del rey de España en sustitución del presidente, el citado Agramunt. El relevo llega en plena polémica por el viaje del senador a Siria, que el régimen de Bachar Al Asad ha utilizado como legitimación a su causa a pesar de que el popular ha defendido que no acudió a aplaudir al régimen sirio sino a promover la paz.

Un portavoz de la presidencia de la Cámara confirmó ayer que el senador por Valencia siguió la alocución de Felipe VI en su despacho, a escasos metros del hemiciclo, a través de la página web del Consejo de Europa, pero no participó en el acto, aunque sí recibió al rey, con el que se fotografió.

El secretario general de la Asamblea, Wojciech Sawicki, aseguró que no podía garantizar a Agramunt la seguridad y el normal desarrollo del acto, ante la posibilidad de que algún legislador protestara por la continuidad del presidente en su cargo. Por ello, Agramunt cedió su puesto a Gutiérrez Limones, senador por Sevilla y uno de los veinte vicepresidentes de la Asamblea. Agramunt informó a don Felipe de esta circunstancia durante el encuentro que mantuvo en su despacho.

El senador por Valencia anunció el martes en una audiencia pública sobre su visita en marzo al presidente sirio, de la que no informó a la Asamblea, que hoy haría una declaración sobre su situación al frente de la institución.

Parlamentarios piden su dimisión

Varios parlamentarios le pidieron su dimisión durante la apertura el lunes de la sesión de primavera de la Asamblea del Consejo de Europa. Agramunt no ha vuelto a presidir la Cámara desde ese momento. Al día siguiente denunció que su habitación de hotel en Estrasburgo había sufrido un asalto en su ausencia.

El presidente tampoco estuvo presente ayer en el acto de entrega de un regalo de España al Consejo de Europa, presidido por el rey Felipe VI, pero sí hizo acto de presencia al finalizar el mismo para posar en las fotografías de familia y de la delegación española.

El Senado dice que se equivocó

Mientras, el presidente del Senado español, Pío García-Escudero (otro veterano del PP), calificó ayer de «error» la visita a Siria de Agramunt. «A mí me parece que es un error», remarcó Escudero a la prensa española en el marco de su visita a Rusia.

García-Escudero destacó que el Senado no sabía nada sobre la visita, que tuvo lugar en marzo y en la que Agramunt se reunió acompañado de parlamentarios rusos con Bachar al Asad en Damasco y visitó la base aérea rusa de Jmeimim. Escudero dijo que Agramunt es muy mayor y lleva muchos años de parlamentario para saber lo que tiene que hacer.