El director general de Tráfico, Gregorio Serrano, adelantó ayer en la comisión de Seguridad Vial del Congreso que la Dirección General de Tráfico (DGT) estudia medidas contra los reincidentes que se ponen al volante bajo los efectos del consumo del alcohol y drogas, con el objetivo de frenar la «sangría» de ciclistas arrollados por este tipo de conductores durante los fines de semana.

El próximo martes se reunirá de carácter «urgente» el Comité de Seguridad Vial, presidido por Serrano, y en el que participan mandos de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, para aprobar un plan especial de protección y seguridad para los ciclistas.

«Es insoportable el número de ciclistas que cada fin de semana fallece. No estamos dispuestos a que la gente que sale con su bici no pueda regresar vivo a su casa», puntualizó ayer Serrano, antes de avanzar que se pondrán en marcha más medidas de vigilancia y otras contra los conductores que reinciden en el consumo de alcohol y drogas.

Por otro lado, Raúl Ruedas, el abogado de la detenida por el atropello el pasado domingo mortalmente de los ciclistas Edu Monfort y Alberto Contreras, y provocó heridas graves a otros tres en Oliva, aseguró ayer que su clienta se encontraba «en estado de shock» y que fue la Guardia Civil «la que le comunicó lo que había hecho. No entendía nada».

El letrado cree que se está produciendo «un linchamiento público en redes sociales a su hermano, su madre, su tía... Se está faltando el respeto a la familia». La conductora está en la cárcel desde el lunes.

Miguel Indurain y Pedro Delgado, dos leyendas del ciclismo y ganadores ambos del Tour de Francia (el navarro cinco veces), rindieron ayer homenaje a los dos vecinos de Xàbia fallecidos.

Indurain y Perico participaron junto a los también ganadores del Tour Carlos Sastre y Óscar Pereiro y otros ex corredores profesionales para inspeccionar el Puig de la Llorença, la cumbre del Poble Nou de Benitatxell que volverá a ser final de etapa en la Vuelta a España.