La concesionaria del departamento de salud de la Ribera, la UTE Ribera Salud II, ha cumplido con la entrega de la primera tanda de documentación que la Conselleria de Sanidad le requería como paso previo a la reversión a la gestión pública del área sanitaria en abril de 2018. Ayer, 15 de junio acababa el primer plazo (marcado por los tribunales tras un recurso de la empresa) para presentar gran parte de la documentación que la administración ve «necesaria» para trabajar una vez tome las riendas del hospital. Así, se pedían datos concretos sobre la cartera de servicios de la Ribera, los inmuebles y las infraestructuras en el área, la actividad asistencial que se realiza o los sistemas de información. Según confirmaron fuentes de la empresa, se había entregado «toda la documentación» requerida para esta fecha sobre la que «era posible dar cumplimiento» ya que había exigencias «incoherentes y virtualmente imposibles de cumplir» que no especificaron.