Hay estudios neurobiológicos que aseguran que el amor dura un año, otros que se alarga hasta los tres. En el grupo de Ciudadanos en las Corts ha durado dos. Así lo escenificaron ayer los cuatro diputados díscolos de la formación naranja que han decidido abandonar el partido por «su viraje ideológico», como adelantó el jueves Levante-EMV. Alexis Marí, Domingo Rojo, David de Miguel y Alberto García son los cuatro parlamentarios a los que la dirección de Ciudadanos, tanto autonómica como estatal, les exige que devuelvan inmediatamente el acta que ganaron en las elecciones de 2015 bajo las siglas de C’s, ahora Cs.

Arropada por diputados estatales, autonómicos, provinciales y concejales, la síndica de la formación naranja no quiso opinar sobre las duras acusaciones que minutos antes, en la misma sala de prensa de las Corts, dirigió Marí tanto al partido como a Albert Rivera, de quien llegó a decir que «se cree el hijo político de Macron, pero es el hijo político de Rajoy». Mari Carmen Sánchez llamó «tránsfugas» a los cuatro parlamentarios que ahora pasarán a engrosar el grupo de No adscritos, donde ya están Covadonga Peremarch (exPodemos) y Miquel Domínguez (exPP).

Sus votos serán decisivos para mantener el equilibrio parlamentario existente. Ayer, Marí se dejó querer y aseguró que es «amigo de todos». No descartó ninguna opción. «La política está viva. No sé qué pasará mañana», dijo, preguntado sobre la posibilidad de terminar en algún otro partido del arco parlamentario o en el del exportavoz de Cs en la diputación, José Enrique Aguar, quien ha fundado la formación política Contigo.

El terremoto llegó a Madrid, donde el secretario general José Manuel Villegas acusó a los diputados de «robar» el acta. El secretario de Organización, Fran Hervías, lanzó un dardo directo a Marí: «Te abrimos las puertas cuando no te querían. Te arropamos y te apoyamos. Ahora robas un acta de los votantes de Cs. Decepción». El portavoz autonómico, Fernando Giner, aludió también a la trayectoria de algunos de los que han abandonado Cs, «más de 40 en la C. Valenciana», según los díscolos. «Que se lo hagan mirar. No se puede hacer un partido con escombros del PP», criticó Marí. «Hay quien ha pasado en cuatro años por tres partidos», repuso Giner, quien añadió que la formación «no tiene ningún problema» de fuga de cargos y reforzó la figura de Rivera. «Es un líder que ha logrado lo que no se había visto en España desde Suárez. Los presupuestos -uno de los motivos de la marcha de los diputados al entender que son discriminatorios para los valencianos- son los primeros sin recortes», expuso.

Grabaciones y espionaje

Los cuatro «tránsfugas» fueron duros, pero en especial Rojo y Marí. Hablaron de prácticas «propias de la Gestapo», en referencia a grabaciones y capturas de pantalla. «No tengo constancia de nada de eso», defendió Sánchez, quien añadió: «Aquí termina el show de Cs».