Son varias las voces que en la pata de Iniciativa de Compromís abogan por cortar por lo sano con el "procés" catalán y acabar con los vínculos de solidaridad que con mayor o menor intensidad se estrecharon con la causa independentista catalana.

Aunque ello, apostillan, suponga desprenderse de los activos más nacionalistas de la coalición. Hay que superar Cataluña y tener en la Comunitat Valenciana un procés con sello propio, defienden. En este reto está la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, quien ayer aprovechó su intervención en el Fórum Europa Tribuna Mediterránea para reivindicar un «patriotismo social» frente al de «bandera».

«Hace tiempo que tengo la amarga sensación de que vivimos en una época donde las banderas sirven para esconder o recortar derechos y la patria, a las personas; donde la testosterona sustituye el diálogo; y los patriotismos épicos, las identidades cívicas», indicó.

Frente a esto, la lideresa de Compromís abogó por un «patriotismo de las personas y no de símbolos; por una identidad basada en el orgullo de pertenecer a una sociedad inclusiva y no por la identificación por oposición o por épica histórica».

La reflexión, en la que no citó expresamente al vecino del norte, conlleva un claro mensaje en clave interna: hay vida después de Cataluña y Compromís debe volver al eslogan que les llevó al Palau de la Generalitat: el rescate de las personas.

Así, Oltra, titular del negociado de Políticas Inclusivas, instó a abrazar el sistema público de protección como elemento identitario. Reivindicó el papel del Estado como protector de los más vulnerables y, en concreto, puso en valor la apuesta del Consell por hacer «de la recuperación y normativización de los derechos sociales una bandera de justicia».

Un corpus legislativo, añadió, para configurar un código social que fije derechos de tercera generación. Entre los logros, citó la ley trans (anunció una nueva para el colectivo LGTB), la renta de ciudadanía y la de juventud. «Aquí hemos hecho un pequeño milagro»

Oltra se centró en las «invisibilidades» que son resultado de estructuras sociales, económicas y políticas que expulsan a las personas. En este bloque de invisibles, Oltra citó a los excluidos; a las mujeres que sufren la desigualdad y la discriminación y, en tercer lugar, a todos los valencianos y valencianas que sufren el maltrato financiero.

Así, la vicepresidenta acusó al Gobierno de Rajoy de incumplir el artículo 156 de la Constitución, que reconoce la autonomía financiera de las comunidades. «Un debilitamiento del estado de las autonomías o no dotarlo de recursos suficientes, supone reducir la intervención en políticas sociales», dijo.

Por ello, abogó por una reforma de la Constitucion que represente la diversidad territorial y comprometida con valores globales.

En el turno de preguntas, Oltra disculpó por motivos de agenda su presencia en el Premio Manuel Broseta a Societat Civil Catalana y echó balones fuera cuando se le preguntó por sus aspiraciones políticas: ¿Dónde se ve en un segundo Botànic?. «Dentro, que ya es mucho», respondió.