Los trabajadores del departamento de La Ribera tendrán que decir adiós este año a sus vacaciones de Pascua, a menos que tengan que coger días por cuestiones «de fuerza mayor». Así lo ha ordenado el actual comisionado de la Conselleria de Sanidad en el área, Salvador Llopis, a través de una nota emitida el pasado 1 de febrero. El objetivo: «no interferir en el normal funcionamiento de los servicios sanitarios» y garantizar que la reversión del área a la gestión pública -que tiene fecha del 1 de abril- se haga sin problemas.

Los quince años de contrato entre la Conselleria de Sanidad y la UTE Ribera Salud II para gestionar y atender el departamento de salud, a cerca de 2.000 trabajadores y a casi 250.000 pacientes concluyen, precisamente el 31 de marzo de 2018 en plena Semana Santa. El día 1 de abril, domingo de Resurección, empezarán para muchos las esperadas vacaciones de Pascua aunque en Alzira es el día D, aquel para el que el Consell del Botànic se lleva preparando desde el mismo día de la toma de posesión.

Es por ello que con dos meses de antelación han decidido bloquear las vacaciones y días libres del personal en previsión de que vaya a ser un día -y una semana- difíciles.

El personal con contrato indefinido seguirá en la plantilla aunque subrogado por la administración bajo la figura de personal laboral a extinguir pero, parte de los contratos laborales actuales no indefinidos acabarán en esa fecha. La «cantidad de los contratos laborales que finalizan el 31 de marzo» es, precisamente, una de las justificaciones aportadas por Llopis para pedir este esfuerzo a la plantilla que no podrá disfrutar de «cualquier permiso» del 1 al 8 de abril «salvo necesidad perentoria motivada o fuerza mayor».

La orden no ha sido bien recibida por parte de los sindicatos que componen el comité de empresa. Por lo pronto, han respondido al comisionado que les parece una medida «precipitada» y que hay suficiente tiempo en los dos meses que restan hasta la reversión efectiva para «realizar una previsión de personal».

De hecho, los sindicatos echan en falta haber celebrado alguna reunión previa con la conselleria para abordar el posible problema de falta de trabajadores y ahora, se quejan precisamente de no haber recibido información por lo que solicitan tener una relación de los puestos que dejarán de trabajar el 31 de marzo y saber cómo se van a cubrir.

«Fuga» de profesionales

«Más de 70 profesionales, entre ellos 46 médicos especialistas» y «profesionales médicos referentes en sus especialidades y de prestigio internacional» habrían abandonado la Ribera desde que se anunció la reversión. Eso es lo que defienden, al menos, desde la gerencia del área que defienden que la salida de personal se ha agudizado desde que la conselleria puso fecha al fin del modelo Alzira y nada tiene que ver las condiciones laborales. «Es totalmente ilógico pensar que estos especialistas han abandonado La Ribera en los últimos meses por las condiciones laborales cuando llevaban en la empresa más de 18 años», argumentan desde la UTE Ribera Salud.