Todos los grupos con presencia en las Corts levantaron ayer la bandera de la máxima transparencia después de conocerse que no habrá, de momento, acuerdo para que justifiquen los 3,3 millones de euros de fondos públicos que los grupos parlamentarios valencianos van a recibir durante 2018.
El síndic de Podemos, Antonio Estañ, fue el más directo. Asegura que es el único portavoz que se mostró dispuesto a votar y a dar el sí el miércoles en la comisión de Interior de las Corts a la entrega de los apuntes contables y al desglose frente a las dudas del resto de grupos que plantearon que la propuesta pasara primero por la Mesa o bien se negaron. «No tiene sentido que los gastos no se justifiquen», abundó ayer Estañ.
Por su parte, el portavoz de Compromís, Fran Ferri, aseguró que cualquier propuesta que provenga de la Mesa para mejorar el control del dinero será bienvenida y añadió que la transparencia de su grupo es «total». Según explica, cada gasto se justifica con factura o tícket y la información está a disposición de las Corts Valencianes y del Tribunal de Cuentas. Además, en la web de Compromís se pueden consultar las cuentas, sueldos, retribuciones y subvenciones de todas las instituciones donde tienen representación.
La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, respondió ayer preguntada en Castelló que la comisión de Interior de las Corts es secreta por lo que dijo que hablaba hasta donde podía: «En el PP no tenemos ningún problema en entregar las cuentas, el año pasado fuimos el primeros en hacerlo y con toda la documentación que se nos requerió desde las Corts; le deberían preguntar a Enric Morera cual es su motivación para pedir las cuentas al PP y hasta aquí puedo decir porque esa reunión era secreta».
El portavoz del PSPV, Manolo Mata, sostiene que los grupos sí están sometidos a control, pero que la ley permite que los partidos den cuenta de toda su estructura nacional o bien que los grupos lo hagan directamente. «Aquí algunos grupos optaron porque lo hicieran los partidos ante la Sindicatura, pero la transparencia es mejorable y hay que hablarlo, pero de momento todos cumplimos la ley».
La portavoz de Ciudadanos, Mari Carmen Sánchez, aseguró que la forma más adecuada para fiscalizar los gastos es que el dinero de los grupos se transfiera al propio partido, que a su vez es fiscalizado por el Tribunal de Cuentas. Sánchez asegura que su partido apoyará cualquier propuesta en favor de la transparencia que sea «con ánimo de revancha».
