La Mesa Técnica de Cooperación Social tiene como objetivo «oficializar» la coordinación entre la Generalitat y la Diputación de València en políticas sociales, para colaborar estrechamente pero sin duplicar acciones.

Así lo subrayó la vicepresidenta y consellera de Inclusión Social, Mónica Oltra, para quien la constitución de la mesa solo da «formalidad» a unas prácticas que se hacían «desde el principio de la legislatura» porque quieren evitar que dos instituciones «trabajen en lo mismo mientras en otros casos no llega ninguna de las dos».

Además, se supervisará el plan de infraestructuras sociales al que la diputación ha destinado 17'5 millones de euros. La corporación financiará la construcción de 11 centros sociales mientras que la conselleria se hará cargo de la dotación de equipos y el concierto de plazas. Los municipios, por su lado, cederán el suelo.

El tercer objetivo que se marcó ayer la mesa es el seguimiento de la puesta en marcha del Pacte Valencià contra la Violència de Gènere, con especial atención a las infraestructuras destinadas a las víctimas de violencia machista.

El Consell intentó coordinar las competencias de las diputaciones en Turismo y Deportes por la vía legislativa, dos materias en las que también trabaja la Generalitat. El Tribunal Supremo tumbó los dos decretos del Consell, por lo que la mesa supone una alternativas de coordinación por la vía institucional y de diálogo entre los técnicos de ambas instituciones.