Pilar G. del Burgo, Valencia
Los cinco especialistas que ayer intervinieron en el debate Globalización y gripe aviaria, ¿algo más que salud humana? que se celebró en el salón de actos del Jardín Botánico de Valencia organizado por cuatro entidades sanitarias destacaron la importancia de destinar más recursos a los países asiáticos donde la enfermedad es una amenaza real y abogaron por la instalación de plantas de vacunas en España para mantener la independencia respecto al resto de los países europeos.
El catedrático de Veterinaria de la Universidad Complutense, José Manuel Sánchez-Vizcaíno quitó hierro a la situación de temor que se ha generado desde diferentes entidades internacionales y aseguró que existe una alerta, pero no alarma, recordó también que el virus existe desde 1959 y destacó que la pandemia no se producirá en Europa, sino en Asia.
El experto indicó que la enfermedad avanza de una manera exagerada en Asia, pero que esa expansión está directamente relacionada con un aumento de la producción en condiciones de bioseguridad muy bajas -a requerimiento de los países desarrollados-, con una higiene deficitaria y mucha humedad.
El veterinario aseguró que la Administración ha tomado las medidas de análisis de riesgo necesarias para evitar que las aves migratorias trasmitan el virus H5NI de la gripe aviaria a las autóctonas.
Sánchez-Vizcaíno no descartó que la infección pueda llegar a España o a la Comunidad, a la que calificó de «alto riesgo», aunque agregó:«pero no serían más de uno o dos focos que podríamos controlar». Andreu Segura, profesor titular de Salud Pública de la Universidad de Barcelona declaró que en los 133 casos de gripe aviaria en humanos, «no se puede descartar que haya habido contagio hombre-hombre, pero si ha habido la difusión ha sido muy pequeña». 25 de los 68 fallecidos fueron tratados con el antiviral Tamiflu, cuya eficacia puso en tela de juicio: «Frente a un riesgo probable de pandemia hay que prepararse, no tomar decisiones fetichistas porque tienen un alto coste y nadie sabe si van a ser útiles». El ponente abogó por revitalizar los servicios de salud pública a los que se dedica un 1% del presupuesto.
El catedrático de Historia de la Medicina de Murcia, Pedro Marset, expresó que no hay motivos para tanta alerta, «que está disparando los intereses de las grandes compañías farmacéuticas con la compra de los antivirales». El docente aseguró que la alarma creada con la gripe aviaria, «es una manera de desviar la atención de los problemas reales que asolan a gran población en el mundo, como son el sida, el paludismo y el tifus». El profesor Marcet manifestó que la pandemia mundial es «poco probable» porque no hay evidencias que demuestren que el virus que está en circulación desde 1959 vaya a mutar.
Hasta 49.000 muertos en España
El responsable de la red española de Vigilancia en Salud Pública del Centro Nacional de Epidemiología Carlos III, Salvador Mateo, informó que en España la tasa de ataque de gripe aviar podría afectar entre un 15 y un 35% de la población; el número de muertes que podría generar oscila entre los 21.000 y los 49.000 y que el número de hospitalizaciones alcanzaría las 236.760.
El epidemiólogo agregó que las epidemias son impredecibles en si mismas y que la Organización Mundial de la Salud estaba preocupada por que el virus H5N1 puede mejorar su trasmisibilidad. El especialista destacó que los profesionales que se dedican a la vigilancia tienen que ponerse de acuerdo en como se abordarán las primeras fases de la extensión de la enfermedad, «porque luego será un caos».
El director general de Salud Pública de la Comunidad Valenciana, Manuel Escolano, abogó por la adquisición de prototipos experimentales de vacunas.
