Levante-EMV, Valencia

La diputada de IU en el Congreso Isaura Navarro ha pedido al Gobierno que la central nuclear de Cofrentes haga una parada cautelar para llevar a cabo una «inspección rigurosa que no deje dudas sobre su seguridad».

Navarro anunció que su grupo ha presentado una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados para que se haga una inspección, ya que considera que la realizada por la organización mundial WANO, solicitada voluntariamente por la central, refleja «graves deficiencias relacionadas con importantes sistemas de seguridad». Entre ellos, citó problemas en los sistemas de lucha contra incendios, en accesos a la sala de control, en la planta de mantenimiento y en los sistemas de refrigeración de emergencias y deficiencias en la formación del personal.

Por su lado, Greenpeace ha remitido un escrito al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) donde le solicita que explique por qué Cofrentes funcionó sin cumplir las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento (ETF) que le obligaban a realizar una prueba integrada de fugas de la contención para verificar su operatividad.

La central nuclear no hizo esta prueba dentro de los plazos establecidos y solo la realizó cuando el Consejo de Seguridad Nuclear le obligó meses después.

Respecto a estas quejas el director de la central nuclear de Cofrentes, Felipe Galán, ya aseguró en una comparecencia pública celebrada esta misma semana que en 2005 la organización internacional WANO concluyó que la mayor parte de los trabajos realizados en Cofrentes se hace bien, aunque se identificaron «áreas de mejora», que en ningún caso «ponen en duda» la seguridad de la planta.

Por lo que respecta a la denuncia realizada ayer por Greenpeace, el portavoz oficial de la central, Jesús Cruz, se limitó a afirmar que el revisión de la contención se hizo «en plazo y forma» y se justificó ante el Consejo de Seguridad Nuclear «apoyada en unos resultados de la prueba excelentes».