Las obras de la nueva rotonda proyectada por el Ayuntamiento de Xàtiva en la carretera CV-58, a la altura del cementerio, provocaron ayer cortes e interrupciones de tráfico en el principal acceso a la ciudad. La intervención persigue facilitar la conexión de los polígonos y descongestionar el colapso diario de coches en la antigua N-340. Los trabajos paralelos de asfaltado obligaron a cortar la entrada a la Llosa de Ranes desde la A7 por la mañana y generaron algunas retenciones. La nueva rotonda, financiada por el consistorio y la Generalitat con un presupuesto de 269.000 euros, tendrá cuatro salidas, dos carriles y 25 metros de radio. Las obras se prolongarán durante dos meses.
