¿Se preocupa en saber cómo recibe su público el disco?
No me obsesiona, cuando haces algo con determinación y te gusta a ti mismo no te va la vida en saber si gusta o no gusta, al menos cuando han pasado solo dos días. Distinto sería si hubiera hecho un disco preparado para gustar a un público concreto; imagínate, por ejemplo, mezclando hip-hop con «metal», que no es lo mío.
¿Alguna vez lo ha hecho: publicar un disco preparado para encandilar a un público concreto?
Jamás, eso no funciona. El gusto del público es algo mágico, no tienes la fórmula ni sabes lo que va a dar con la tecla. Por ejemplo, cuando Mägo de Oz dio en el clavo, incluyendo los violines y todo aquello, lo hizo sin querer, sin saber si tendría ese impacto. Por eso lo único que puedes hacer es lo que quieres tú, trabajar con sinceridad. En este disco hay una amalgama muy peculiar, canciones muy abiertas.
En ese aperturismo ha llegado a coquetear con el pop...
Sí, bueno y con el «death metal» (una de las variantes más duras del «heavy metal»). Lo hago todo de manera consciente y sincera. Entre mis influencias encuentras desde Malú hasta Slayer.
¿Y cómo surgió lo de hacer un dúo con Merche?
De una manera muy natural. Compartimos baterista y mediante él nos hemos hecho muy amigos; así que un día nos vimos cantando juntos y salió un tema que creo que tiene lo mejor de las baladas «heavy» y la dulzura de Merche.
¿El aperturismo no le ha granjeado críticas dentro del público «heavy»?
Muchas, pero me da igual, esta es mi verdad. Vivo al margen del purismo. Como en el fútbol: soy de un equipo, el Atleti, pero luego disfruto viendo un buen partido de quien sea. Disfruto del fútbol.
¿Es el público de este género especialmente estricto?
En cierto sentido sí. Si un artista de otro género, pongamos por ejemplo a Antonio Orozco, lanza un disco más rockero, a nadie le parece mal si después vira hacia la electrónica. Sin embargo, imagínate que Barón Rojo saca un disco con música electrónica. ¡Es impensable! (ríe).
¿Lo de desentenderse de las críticas por el estilo le ha venido con la edad o siempre ha sido así?
Antes me importaba aún menos. Con la edad entiendes que este es tu trabajo y aunque te fastidie tienes que escuchar las críticas. Lo que pasa es que hay gente que te critica incluso antes acabar de escuchar el primer adelanto del disco; escriben «este no es el disco que esperaba de Leo Jiménez». Primero, ningún artista va a hacer un disco a tu medida y, segundo, dale unas cuantas escuchas más y a ver qué te parece.
