La Fundación Bancaja muestra por primera vez de forma conjunta la obra de 14 artistas internacionales contemporáneos presentes en su colección de arte, cerca de medio centenar de piezas, el 41 % de ellas inéditas, realizadas entre 1984 y 2010 y que reafirman la capacidad de la pintura para emocionar y hacer pensar.

"Una exposición como esta demuestra que la pintura goza de buena salud", ha asegurado Juan Manuel Bonet, director del instituto Cervantes, durante la presentación hoy de la exposición "Arte contemporánea (1984-2010). Colección Fundación Bancaja", quien se ha mostrado "feliz" de poder "revivir" el tiempo en el que estuvo en València como asesor de esta colección y "emocionado" de poderla ver junta.

José Manuel Ballester, Miquel Barceló, Carmen Calvo, Helmut Federle, Günther Forg, Axel Hütte, Imi Knoebel, Miquel Navarro, Juan Navarro Baldeweg, Julián Opie, Sean Scully, Soledad Sevilla, Juan Uslé y Manolo Valdés son los artistas representados en esta muestra, que podrá visitarse hasta el próximo 29 de septiembre.

La colección de arte contemporáneo internacional de la Fundación Bancaja, en la que están representantes distintas disciplinas como pintura, escultura, grabado y fotografía, se inició en 2004 con la adquisición de obras en ferias como ARCO, Basilea o Lisboa bajo el asesoramiento de Bonet.

Ahora se muestra por primera vez de forma conjunta al público en una exposición que, según José Manuel Bonet, "abre muchos caminos" y "reafirma la capacidad de la pintura por emocionarnos y hacernos pensar".

Durante la presentación, el exasesor de la colección de la Fundación Bancaja ha explicado que el "hilo conductor" que llevó a hacer esta colección es la "creencia en la continuidad del hecho pictórico, la fe en las posibilidades de la pintura".

Según Bonet, aunque una parte de la crítica cree que la pintura pertenece al pasado, "esta exposición es un rotundo desmentido a eso, en la medida en que pintores muy diversos, de distintas nacionalidades y estilos, confluyen en que sus cuadros nos invitan a disfrutarlos y a pensar el mundo a partir de ellos".

La colección empezó a hacerse con obras de Miquel Barceló, de quien ha destacado que, aunque comenzó como "un salvaje", se convirtió en un pintor "mucho más culto"; de Juan Uslé, a quien ha considerado una "figura muy destacada de la escena española y de los Estados Unidos", y de Juan Navarro Baldeweg, del que la Fundación posee su cuadro de mayores dimensiones.

Después se concentró la atención en la escena alemana, suizo-alemana y austríaco-alemana, con figuras que practicaban la geometría como Günther Förg, un "loco de las arquitecturas de los años de las vanguardias"; Imi Knoebel; o Helmut Federle, "maravillosa y obsesivamente riguroso".

En fotografía, Bonet ha destacado el trabajo del Premio Nacional de Fotografía José Manuel Ballester, que a partir de 1990 se centró en la fotografía arquitectónica; y el del alemán Axel Hütte, que practica la cámara de gran formato y adopta una estética fría y una mirada neutral.

José Manuel Bonet ha subrayado la obra de Julian Opie, pintor inglés que trata de introducir en la mirada metropolitana una experiencia estética y con cuyo trabajo pretende atrapar lo esencial, dando protagonismo a la línea y el color.

El dublinés Sean Scully es, a juicio de Bonet, uno de los pintores abstractos más prestigiosos y cotizados de la escena artística neoyorkina y cuya pintura se caracteriza por presentar franjas tanto verticales como horizontales, donde el color tiene gran protagonismo y en la que consigue gran armonía entre formas y colores.

También ha destacado la figura de Miquel Navarro, considerado una de las voces más personales de la escultura contemporánea; y de Manolo Valdes, la "mitad" del Equipo Crónica, que recrea y recontextualiza algunos de los iconos más representativos de la historia del arte como Velázquez o Goya.

De la valenciana Carmen Calvo ha destacado que es uno de los referentes en la conceptualización contemporánea del fragmento; y de la también valenciana Soledad Sevilla, su tratamiento del espacio y la luz, la transparencia o las relaciones con la poesía que de sus obras se puede derivar.

Por su parte, el presidente de la Fundación Bancaja, Rafael Alcón, ha explicado que la Fundación cuenta con más de 2.000 piezas de arte contemporáneo y que la política de la entidad es "no adquirir más obras de momento".