La familia del DJ sueco Avicii, que fue encontrado muerto el pasado viernes en Omán, dijo ayer que el artista, una de las grandes estrellas mundiales de la música electrónica, ya no tenía «fuerzas» para luchar y solo buscaba la «paz». «Luchó realmente con pensamientos sobre el sentido de las cosas, la vida, la felicidad. Ahora ya no tenía fuerzas, quería encontrar la paz», señaló en un comunicado la familia, que días atrás había agradecido públicamente el apoyo recibido tras su muerte.

Tim Bergling era «un buscador», un alma artística «frágil» interesado en las cuestiones existenciales, un perfeccionista que trabajaba duro «a un ritmo que le llevó a tener muchísimo estrés», asegura su familia. Se trata de una declaración que apunta al suicidio, según han interpretado algunos medios, sin que la familia lo haya confirmado.

Tras anunciar en marzo de 2016 su retirada temporal de los escenarios, el DJ sueco intentó buscar «un equilibrio» en su vida para encontrarse bien y hacer «lo que más quería: música». «Tim no estaba hecho para la maquinaría en la que estaba metido, era un chico tierno que amaba a sus seguidores pero evitaba los focos», consta en el comunicado, que asegura que el músico será querido y extrañado «para siempre».

Nacido en Estocolmo el 8 de septiembre de 1989, Avicii alcanzó relevancia mundial como DJ y productor de música con su canción «Levels». La trayectoria de Avicii incluye otros temas muy populares como «Wake me up» y «Hey Brother» y discos como True (2013) o Stories (2015).