El Levante UD hincó la rodilla en el campo del Villarreal B. Vencieron los vila-realenses porque sencillamente fueron mejor equipo. Buscaron con insistencia la portería rival, gozaron de las mejores ocasiones y al final lograron perforar la meta defendida por Jesús Garabato en el minuto 55, por mediación del mediapunta argentino Facundo Coria, al rematar un preciso centro de Jaume Costa. El conjunto "granota" claudicó. Fue incapaz de lanzar una sola vez entre los tres palos del arco de Vicente Flor. Y es más, el 2-0 no llegó de milagro porque la escuadra amarilla dispuso de cuatro o cinco ocasiones más para poner la puntilla.
Muchos rostros jóvenes en ambas escuadras. En el Levante UD hubo una amplia representación del filial. Apostó de salida por un 4-3-3. Una línea defensiva bien definida con Iván y Jalid en los laterales, y Héctor Ródenas y Robusté en el eje de la zaga. Tres pivotes: Gorka Larrea, Xavi Torres y Lois; mientras que el tridente ofensivo fue para Higón y Mono pegados en banda, con Rafa Jordà más centrado. Los chavales del B estuvieron animados, aunque se cometieron continuas pérdidas de balón.
El Villarreal B, que llevó la voz cantantes, fue quien más cerca estuvo de inaugurar el marcador. Hernán Pérez, en el minuto 12, estrelló el cuero en la cepa del palo izquierdo de Sergio Garabato. La segunda ocasión clara fue para los levantinistas. El joven Adrián Lois lo intentó por el centro, lanzó con fuerza, pero el balón se estrelló en el cuerpo de un central. El tercer aviso fue para el "Submarino" B. El argentino Gonzalo Castellani se regateó a medio Levante UD, pero luego lanzó a las nubes. Con tanta juventud en el once, es comprensible que el conjunto granate sufriera por momentos. En especial por el carril zurdo donde el joven ceutí Jalid Kerkich se veía sorprendido por la fuerza y el coraje de Hernán Pérez. El internacional paraguayo completó un gran primer tiempo y sólo le faltó el gol. Tuvo dos ocasiones, pero ninguna de las dos acabó con el cuero al fondo de la red.
Con los cambios, desbordados
Carrusel de cambios en el Levante UD nada más arrancar el segundo tiempo. Se quedaron en el vestuario Jalid, Robusté, Jordà e Higón, entrando en su lugar Pallardó, Sergio, Antonio López y Rubén. Menos retoques hizo el técnico del Villarreal B. En defensa, Ortega entró por Truyols, y en la mediapunta Coria por Pérez.
El arranque fue un monólogo amarillo. Mucho toque, mucha posesión de balón, pero a los anfitriones les costaba Dios y ayuda llegar a los dominios de Garabato. El gol, por momentos, se mascaba en la grada. Y llegó después de una gran acción del lateral valenciano Jaume Costa que centró raso para que el argentino, ex de Argentinos Juniors, rematara al fondo de la portería. Era el 1-0 y se puede decir que se empezaba a hacer justicia. La valentía del filial amarillo tuvo recompensa ante un Levante que le ponía ganas, pero le faltó algo de chispa, por momentos frescura y además algo más de precisión. Llegados al minuto 70, Luis García ya había cambiado diez de los once futbolistas. Únicamente se mantuvo el portero Garabato. Mientras, en ataque los levantinista seguían sin dar señales de vida. Y es que mientras el 2-0 rondó la portería del Levante UD en repetidas ocasiones, los levantinistas no fueron capaces de lanzar entre los tres palos prácticamente en los noventa minutos. Y así encajaron la primera derrota en la presente pretemporada.
