Con la mirada puesta en el derbi copero contra el Levante, el Valencia recibe hoy a la Real Sociedad. Un rival incómodo. Y es que, si el Valencia se presenta en Mestalla eufórico por haber liquidado al Sevilla y superado la barrera sicológica de los octavos de final, la Real Sociedad comparece hundida tras caer eliminada ante el Mallorca cuando tenía el pase a cuartos al alcance de la mano (6-11). Y es que, el recibir cuatro goles en diez minutos, ha incendiado al entorno del equipo. Y así, con poco crédito, acude el grupo de Philippe Montanier a Mestalla.

En el Valencia, aunque se perdió en el Pizjuán, las sensaciones son opuestas. El optimismo invade al equipo de Emery que ve el partido de esta noche como el momento idóneo para acabar de enganchar a la afición al equipo. El técnico, al menos así lo anunció ayer, variará su once habitual para dar la titularidad a jugadores "más frescos" ya que el cansancio empieza a hacer mella. Y así lo corrobora la convocatoria porque el técnico deja en la grada a Miguel, Victor Ruiz y Albelda, además de prescindir del sancionado Soldado. Y da entrada al indultado Ricardo Costa y al canterano Paco Alcácer. El sistema, si el técnico no juega al despiste, no variará porque se pretende mantener el mismo estilo de juego. "El estilo lo tenemos definido y consolidado y todos los jugadores lo tienen mecanizado", sostiene Emery. Dos de los jugadores que pasaran del banquillo a la titularidad serán Dealbert y Aritz Aduriz, futbolistas que no modifican ni un ápice la personalidad del equipo.

Para la Real, Mestalla será el purgatorio del fracaso cosechado en la Copa del Rey, 6-1 ante el Mallorca, un partido al que los guipuzcoanos -equipo ligado sentimentalmente a Unai- llegan además apremiados por la clasificación, con el descenso a dos puntos. Es una incógnita saber cómo responderá el equipo vasco al varapalo y cómo aprovechará el Valencia esta situación para acercarse aún más al segundo puesto.