¿Por qué apoya este proyecto de Wings for Life?

En esta carrera todo lo recaudado en la inscripción se destina a la investigación para la lesión de médula espinal. Todos los días ocurren lesiones de este tipo, todos podemos estar tan cerca de sufrir una situación como esta que nos cambia totalmente la vida. Me di cuenta de lo importante que era enseguida.

¿Alguna vez imaginó la vida sin poder correr o caminar?

No, sinceramente no, nunca. Es una de las cosas que me hacen sentir libre, cuando corres es sensacional, no podría imaginarme vivir sin ello, la verdad.

Hace unos días, en una entrevista a un atleta ciego nos decía que no estamos aquí para sobrevivir sino para vivir...

Es impresionante lo que logran los atletas paralímpicos. Nosotros no valoramos muchas cosas de las que hacemos cada día. Cuando conoces a personas del movimiento paralímpico empiezas a apreciar más muchas facetas del día a día. Es genial ver lo que luchan, lo competitivos que son. Son campeones cada día de sus vidas.

¿Ha corrido alguna vez en Valencia?

No, nunca pude correr aquí, pero sé que ahora se la considera la capital del running y es genial. Que la gente haga deporte y salga a correr es fantástico y estoy deseando comprobar cómo asumen esta prueba y lo que la gente de Valencia tiene que decir de la «wings for life».

Aquí hay mucha afición, pero es un fenómeno global. ¿A qué se debe?

Creo que es por la diversión de hacer deporte. Es fantástico y me encanta el hecho de que las personas reconozcan los beneficios de correr no sólo físicos, que son obvios, sino muchos otros. Sirve para reunirte con amigos, familiares, para formar comunidades informales. El running es ya una comunidad global y en esa línea planteamos nuestra carrera. Como un proyecto global y coordinado.

En 2006 Liu Xiang le quitó el récord de los 110 metros vallas que tenía desde 1993. ¿Ya lo ha perdonado?

Todavía no, no me hables de él (risas). Para mí fue un gran honor lograrlo y luego haberlo mantenido tanto tiempo. Fue algo grande para mí y para el deporte. Fue genial tener ese momento, ese sentimiento y esa emoción, pero ya pasó. Luego llega gente nueva y no es ningún problema que ellos logren también sus récords.

Por el contrario, su récord de los 60 metros vallas (7.30) sigue invicto desde 1994. ¿Ve ahora alguien capaz de batirlo?

Mmm... Ahora no veo a nadie capaz de lograrlo. La verdad es que cuando lo veo ahora por televisión todavía me asombro de que pudiera correr tan rápido. Para lograr algo así se han de juntar varios factores, tener un día muy veloz, coordinar todos los movimientos, la temperatura? Es difícil pensar en alguien que pudiera lograrlo hoy.

Fue cuatro veces campeón de Europa y dos mundial pero, ¿cambiaría todo eso por un oro olímpico?

No, para mí tener constancia en cada competición y lograr resultados era importante. A veces ocurre que uno llega a unos Juegos y es campeón olímpico sin haber logrado muchas cosas antes. Yo tuve la suerte de permanecer invicto en 44 carreras (entre agosto de 1993 y febrero de 1995) y eso tampoco lo cambiaría. Estoy realmente contento con lo que conseguí, aunque solo tuviera una medalla olímpica (el bronce de Seúl, 1988).

Ha participado en televisión. Aquí tenemos a Gary Neville, británico como usted, que era comentarista y ahora entrena al Valencia. ¿Está siguiendo su trayectoria?

Sé que están en una situación complicada ahora mismo, pero el problema del fútbol es que se quieren resultados inmediatos, en el mundo del deporte esto es complicado. Creo que ha de haber más comprensión y tolerancia, la gente a veces no acierta enseguida porque necesita tiempo, incluso años tal vez. Hay que trabajar y trabajar.