La primera plaza pasa a ser una quimera y la segunda está más en peligro que nunca. La derrota del Valencia Basket en Málaga hace que los valencianos no dependan de sí mismos para ser segundos. Para ello deberán esperar que el Real Madrid pierda el miércoles ante el Laboral Kutxa o el domingo en Sevilla y, por supuesto, ganar en la Fonteta al Andorra.

El primera puesto está casi imposible ya que un solo triunfo del Barcelona en las dos jornadas restantes sería suficiente. Triste epílogo para un equipo que soñó con hacer historia en la Liga regular y que posiblemente se verá abocado a jugar el cruce de cuartos de final del playoff ante su rival de ayer.

Arrancan fuertes

El Valencia Basket arrancó muy serio el partido con un quinteto inicial novedoso con la presencia de Stefansson que volvía a Málaga tras su salida en verano y la de Shurna, cubriendo la baja de Sikma. No le salió mal esta fórmula a Pedro Martínez que, con un juego fácil y práctico, logró marcharse en el marcador en los primeros compases gracias a la inspiración de Vives (9-18). Con un buen trabajo en el rebote ofensivo, el tiempo muerto pedido por el técnico local, Joan Plaza, el choque fue cambiando y así se ajustó el marcador al finalizar el primer cuarto (19-20).

Reacción local

El conjunto malagueño afrontó el segundo cuarto en la misma línea. La intensidad defensiva en el Valencia Basket descendió y el Unicaja lo aprovechó con los puntos de un motivado Nedovic, Dani Díez o Thomas. Así, de un 28-31 favorable a los valencianos, se encajó un parcial de 11-0 que dio un primer aviso en el electrónico (39-31). Un arreón final liderado por Hamilton dejó el choque abierto al descanso (42-37).

La segunda parte comenzó mal para los de Pedro Martínez. Recordando algo la mala imagen dada en Murcia, el conjunto taronja encontró problemas para anotar y Nedovic sacó su mejor versión para disparar de manera peligrosa la renta local (56-39).

El Valencia Basket lo intentó pero sin fortuna y poco a a poco se fue diluyendo. Los malagueños, con el marcador a favor, controlaron el choque sin demasiadas complicaciones durante el resto de los minutos ante un equipo taronja que solo opuso resistencia a través del ímpetu y la calidad individual de San Emeterio. Esta vez el cántabro no fue suficiente para evitar una derrota muy celebrado por la grada del Carpena.

El Unicaja cumplió el objetivo, será sexto y casi encamina su emparejamiento en el playoff con los valencianos. Los taronja deberán de nuevo afinar las virtudes mientras se sigue a la espera de un fichaje que todavía no ha llegado.

Posibles rivales

Por su parte, el FC Barcelona Lassa tratará de refrendar hoy su liderato ante un Estudiantes que podría estar ya descendido a la hora del partido, en una penúltima jornada de la Liga Endesa en la que Montakit Fuenlabrada, UCAM Murcia, Iberostar Tenerife y Dominion Bilbao Basket, estos dos últimos enfrentándose entre sí, buscarán acercarse a las dos plazas de «play-off» que quedan.