­La gimnasta de Turís, Elena López, recibió ayer un sonoro homenaje en su municipio tras conseguir en los pasados Juegos Olímpicos celebrados en Río la medalla de plata con la Selección Española de gimnasia rítmica en la modalidad de conjuntos. La deportista valenciana fue recibida por centenares de vecinos y por la corporación local, firmó en el Libro de Honor del consistorio y se dirigió a los vecinos desde el balcón del ayuntamiento.

Eran alrededor de las 19.30 horas cuando López llegaba acompañada por sus hermanos a la Avinguda de les Corts Valencianes, donde ya le esperaban la corporación municipal, con el alcalde Eugenio Fortaña al frente, numerosos vecinos, familiares, sus amigas y representantes de todas las asociaciones locales que existen en el municipio, los cuales fueron invitados por el consistorio al acto protocolario. La comitiva se dirigió al ayuntamiento acompañada por la Sociedad Musical Turisense, donde la gimnasta firmó de nuevo en el Libro de Honor, aunque esta vez como medallista olímpica. Tras el acto protocolario, la gimnasta de Turís salió al balcón consistorial junto con su familia, la corporación municipal y las festeras, y se dirigió a los vecinos con un discurso en el que agradeció el apoyo del pueblo y aseguró ser un orgullo representar a España y llevar el nombre de Turís por todo el mundo. Antes, sin embargo, fue el turno del alcalde turisano, quien aprovechó el acto para entregar un pergamino conmemorativo a la deportista bajo el lema «L´ orgull de tot un poble» y para informar a los vecinos de que la corporación presentará en el pleno una propuesta para que el gimnasio municipal lleve el nombre de la deportista y se la nombre hija predilecta del municipio. De hecho, Elena ya da nombre a una calle próxima a las instalaciones deportivas. El primer edil también recordó los inicios de la joven en el mundo de la gimnasia rítmica y todo el esfuerzo que ha realizado a lo largo de los años.

López comentó tras finalizar la ceremonia a Levante-EMV que «no tenía ninguna duda del apoyo del pueblo, pero no imaginaba un recibimiento así». La joven firmó numerosos autógrafos y el homenaje finalizó con un castillo de fuegos artificiales.