El lanzador de peso valenciano Kim López logró ayer, con una marca de 15,44 metros en la clase F12 de discapacitados visuales, la medalla de bronce en la penúltima jornada del Mundial de atletismo adaptado de Londres.

López, que en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro logró el oro con un lanzamiento de 16,44 metros, no pudo subirse a lo más alto del podio en Londres al quedarse a un metro de esa marca, aunque repitió la medalla de bronce conseguida en el último Mundial disputado en Doha.

El bronce de López es la octava medalla para la selección española en este Mundial. El balance, por el momento, es de un oro, dos platas y cinco bronces.

«Pensaba que iba a lanzar más después del primer lanzamiento, porque llevo una semana entrenando por encima de los 16 metros y pensaba que si lo hacía la medalla sería de otro color. A mitad de prueba se ha puesto a llover y ya nos fuimos al garete. Estoy contento por el bronce, pero mal por la competición», dijo López.