La producción valenciana de chufa caerá este año un 20% respecto a la campaña anterior, debido a la reducción de la superficie cultivada motivada por la crisis de rentabilidad del pasado año, según las estimaciones de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA).
La asociación agraria ha señalado que la cosecha se situará este año en cerca de 5.000 toneladas, provenientes de las cerca de 4.200 hanegadas cultivadas en l'Horta Nord. Además, el rendimiento de la cosecha será "aceptable", al alcanzar los 1.300 kilos por hanegada, gracias a unas condiciones climáticas "muy favorables" salvo por las fuertes precipitaciones registradas en el momento de la siembra.
Respecto a la producción del año pasado, las mismas fuentes informan de que los precios en origen cayeron un 40%, por lo que muchos agricultores decidieron no volver a plantar, de manera que la superficie cultivada se ha reducido en un 25%.
La mayoría de las parcelas en las que este año no se ha plantado chufa corresponde a poblaciones con menor tradición de cultivo que eran, además, las que obtenían un peor rendimiento. Por el contrario, en la huerta de Alboraia y Almàssera, donde el tubérculo está más arraigado, apenas ha bajado la superficie cultivada y se alcanza una alta productividad.
El responsable de la sectorial de Chufa de AVA-ASAJA, Antonio José Gimeno, ha señalado que el aumento de la producción autóctona y de las importaciones de chufa foránea han hecho más difícil la venta de este tubérculo en un mercado "limitado". Según Gimeno, existe un "descontrol" en las importaciones de chufa de Mali, Nigeria o Níger, por lo que ha destacado la necesidad de defender el producto como valenciano.
Además, las ventas de horchata industrial han caído más de un 25% y las de % por ciento.
