El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, pidió hoy un sistema de sanciones casi automáticas para los países que incumplan sus compromisos presupuestarios, e insistió en que el reto para los gobiernos es hacer creíble sus programas de ajuste y de reformas estructurales.

Trichet, en una comparecencia ante la prensa en París, dijo que con el actual marco institucional europeo se pueden "hacer grandes progresos" para llegar a "una casi automaticidad de la vigilancia y de las sanciones".

El presidente del BCE indicó que el mensaje para todos los países es que tienen que "dar todas las medidas que den credibilidad a los objetivos en materia presupuestaria".

También han de "tomar todas las medidas de reforma estructural que permitan elevar el ritmo de crecimiento potencial" a un nivel mayor que el actual, añadió.